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DOMINGO MONTERO hermenéutica de sus obras prodigiosas, calificándolas como signos iniciales y proféticos del reino de Dios. Su actividad exorcista es “signo de que el reino de Dios ha lle­ gado a vosotros” (Mt 12, 22-28). Las curaciones son expresión de la función salvadora del Reino, presencia dinámica del Reino, que aún no ha alcanzado su plena realización (Mt 11,3-6). Los milagros de Jesús no son pirotecnia de una feria popular, sino llamada apremiante a la conversión, a reconocer el amor de Dios y a acogerse a él acogiéndole en la vida. Cosa que no hicieron Corozaín, Betsaida y Cafarnaún (Mt 11,20-24; Le 10,13-15). Hacer milagros no es un criterio irrefutable ni universalmente válido para dictaminar la bondad y la verdad de una persona o de un mensaje (Me 13,22). Jesús, al tiempo que admite que otros hagan prodigios (Mt 12,27), rechaza la búsqueda ansiosa del milagro como prueba o argumento que dispense de la gratuidad y libertad del acto de fe (Mt 12,38-40; 16,1-4; Jn 4,48). No deja de ser llamativa la orden de Jesús imponiendo silencio a los beneficiados por su acción sanadora (Me 1,34.44; 5,43). En el fondo obedece a la resistencia de Jesús a ser identificado y reducido a un mero taumaturgo, portador de bienestar a corto plazo y a bajo precio. Los milagros de Jesús son signos, revelaciones, no solucio­ nes; por eso la reprensión a aquellos que, tras haber visto saciada su hambre de pan, le buscan afanosamente (Jn 6,26-27). “Separados de la misión de siervo, los milagros deJesús habrían anunciado, no ya la libertad humana ante aquello que es raíz de la muerte, sino un paraíso infantil en donde la situación bienaventu­ rada de los hombres no hubiera sido el fruto de decisión, sino sim­ plemente el efecto de la arbitrariedad poderosa de un monarca ... Por otro lado, Jesús vinculó inseparablemente los milagros a la fe; a su fe en el poder de Dios (Jn 11,42) y a la fe de los destinata­ rios de los milagros. “¡Basta que tengas fe.r (Me 5,36); “ hágase con­ forme a vuestra f e ” (Mt 9,29). Una fe en la persona de Jesús: “¿Creéis 9 C. DUQUOC, Cristología: ensayo dogmático sobre Jesús de Nazaret, el Mesías, Salamanca, Sígueme, 1974. 128 NAT. GRACIA LX l/eneroabril, 2013, 119-146, ISSN: 0470-3790