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CARLOS MONTES PÉREZ bién se percibe el énfasis hermeneútico de Dilthey en la insistencia interpretativa de la acción humana como experiencia significativa. Clifford Geertz pone de manifiesto que el significado es el elemento fundamental de la religión, por eso el nivel cultural debe gozar de autonomía en el análisis humano. Este planteamiento general poste­ riormente se concreta en el análisis de los símbolos sagrados como expresión del mencionado significado de la práctica social. La primera propuesta respecto a los tres sistemas de Parsons está clara; liberar a la cultura de la dependencia de los niveles psi­ cológico y social, de modo que, deje de ser la categoría residual en que la han convertido. Geertz se apoya demasiado en esta visión culturalista y cae de nuevo en un cierto reduccionismo mal inter­ pretado posteriormente8. No hay ningún tipo de recelo en asumir la dimensión planteada por Parsons y por Shils en el análisis de la reli­ gión9, pero con cierta matización: afirma que los actos culturales son acontecimientos sociales, pero que no son la misma cosa, dando a entender la nueva dimensión que propone para los esquemas cultu­ rales10. Se refiere el antropólogo norteamericano a que la dimensión simbólica de los acontecimientos sociales, así como la dimensión psicológica, se puede teóricamente abstraer de dichos hechos como totalidades empíricas. De tal modo, que el carácter multidimensional de la acción, puede ser autónomamente analizado. El análisis cul- importa es que por medio del estudio de la religión se percibe la autonomía que manifiestan los elementos culturales sobre la conducta, lo que permite una mayor capacidad de análisis. 8 “Los conceptos religiosos se extienden más allá de sus contextos específica­ mente metafxsicos, para suministrar un marco de ideas generales dentro del cual se pueden dar forma significativa a una vasta gama de experiencias intelectuales, morales o emocionales ” C. GEERTZ, “La religión como sistema cultural”, en C. GEERTZ, La interpretación de las culturas, Barcelona, Gedisa, 1988, lió. 9 “Limitaré mis esfuerzos a lo que Parsons y Shils han denominado la dimen­ sión cultural del análisis religioso”, C. GEERTZ, O. c., 1988, 88. 10 “Los actos culturales, la construcción, aprehensión y utilización de las formas simbólicas son hechos sociales como cualquier otro, son tan públicos como el matrimonio, y tan observables como la agricultura. Sin embargo, no son exacta­ mente lo mismo”, C. GEERTZ, O. c., 1988, 90. 64 NAT. GRACIA LX 1/eneroabril, 2013, 59-91, ISSN: 0470-3790

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