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MODESTO BERCIANO de la creación y de la redención (cf. Col. 1,15-20), recapitulador de todas las cosas (Ep. 1,10)’™. Este plan divino de salvación antes de la creación se extiende a toda la humanidad: “La acción salvífica de Jesucristo con y por medio de su Espíritu, se extiende más allá de los confines visibles de la Iglesia y alcanza a toda la humanidad ”141. La Iglesia prolonga la presencia de Cristo en la historia: “El SeñorJesús, único salvador, no estableció una simple comunidad de discípulos, sino que constituyó a la Iglesia como misterio salvífico: Él mismo está en la Iglesia y la Iglesia está en Él (cf. Jn. 15,1 ss.; Ga. 3,28; Ef. 4,15-16; Hcb. 9,15); po r eso la plenitud del misterio salví­ fico de Cristo pertenece también a la Iglesia, inseparablemente unida a su Señor”142. La Iglesia es llamada, citando el Concilio, “sacra­ mento universal de salvación y se dice que “es necesaria para la salvación, pues Cristo es el único Mediador y el camino de salvación, presente a nosotros en su Cuerpo, que es la Iglesia ,n43. ¿Cómo llega la salvación a todos los hombres? “Acerca del modo como la gracia salvífica de Dios, que es donada siempre por Cristo en el Espíritu y tiene una misteriosa relación con la Iglesia, llega a los individuos no cristianos, el Concilio Vaticano II se limitó a afirmar que Dios la dona “po r caminos que Él sabe”144. La Declaración Dominus Iesus sí repite que la Iglesia de Cristo subsiste ( subsistit iri) en la Iglesia católica; y acentúa esta afirmación añadiendo que “sigue existiendo plenamente sólo en la Iglesia cató­ lica ”. Pero añade también como el Concilio que “fuera de su estruc­ tura visible pueden encontrarse muchos elementos de santificación y de verdad ”145. Y afirma que “ciertamente las diferentes tradiciones religiosas contienen y ofrecen elementos de religiosidad que proce­ den de Dios y queforman parte de todo lo que el Espíritu obra en los 140 CONGREGACIÓN PARA LA DOCTRINA DE LA FE, Dominus lestes. Sobre la unidad y la universalidad salvífica deJesucristo y de la Iglesia, 11. 141 Ib., 12. 142 Ib., 16; cf. Lumen gentium, 7. 143 Dominus Iesus, 20; cf. Lumen gentium, 48. 144 Dominus Iesus, 21; CONCILIO VATICANO II, Decreto Ad gentes, 7. 145 Dominus Iesus, 16; cf. Lumen gentium, 8. 54 NAT. GRACIA LX 1/enero-abril, 2013, 9-58, ISSN: 0470-3790

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