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LA NUEVA EVANGELIZACIÓN, TAREA Y MISIÓN DE LOS COMPONENTES. los consagrados demuestran que se han comprometido y entrado en el camino de la nueva evangelización? ¿Los consagrados admiran y valoran las otras religiones como son en sí y sus experiencias y vivencias del Dios vivo y Misericordioso? “En este contexto (de “Nueva evangelización”y deseo de espiri­ tualidad) han de ser insertados el encuentro y el diálogo con lasgran­ des tradiciones religiosas, enparticular las orientales, que la Iglesia ha aprendido a vivir en las últimas décadas, y continúa intensificando. Este encuentro aparece como una ocasiónprometedorapara aprender a conocer y a confrontar la forma y los lenguajes relativos a la cues­ tión religiosa, tal como se presenta en otras experiencias religiosas. Esto permite al catolicismo comprender con mayor profundidad los modos con los cuales lafe cristiana escuchay asume cuestión religiosa de cada hombre” (Lineamenta 8, final). L a BÚSQUEDA DEL ATRIO DE LOS GENTILES Volvemos a transcribir los Lineamenta , n. 5: “Se tiende a pensar que con esta definición (la de la nueva evangelización) se realice un cambio en la actitud de la Iglesia hacia aquellos que no creen, trans­ formados en objeto de persuasión y no ya vistos como interlocutores en el contexto de un diálogo que nos descubre a todos unidos po r la misma humanidad y en la búsqueda de la verdad de nuestra existen­ c i a A esta última preocupación ha querido prestar atención y tam­ bién dar una respuesta el Papa Benedicto XVI en su viaje apostólico a la República Checa: “Me vienen aqu í a la mente laspalabras quefe - sús cita delprofeta Isaías, es decir, que el templo debería ser una casa de oración para todos lospueblos (cf. Is.56, 7; Me 11, 17). Él pensaba en el llamado upatio de los gentiles”, que desalojó de negocios ajenos afin de que el lugar quedara libre para los gentiles que querían orar a llí al único Dios, aunque no podían participaren el misterio, a cuyo servicio estaba dedicado el interior del templo. Lugar de oración para todos los pueblos: de este modo se pensaba en personas que conocen a Dios, por decirlo así, sólo de lejos; que no están satisfechos de sus dioses, ritos y mitos; que anhelan al Puro y al Grande, aunque Dios NAT. GRACIA LIX 3/septiembre-diciembre, 2012, 515-541, ISSN: 0470-3790 533

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