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MIGUEL DE UNAMUNO. EL JUEGO DE LA LÓGICA Y LA LÓGICA DEL JUEGO y todo esto únicamente para ser uno mismo. ¿Y cómo sucede eso? Siendo creadores. Por eso es un divertimento creador. “Si el término no estuviera tan depreciado convendría hablar de divertimento , no tan injustificado como su autor desearía, pero divertimento y p ara ­ doja al f i n ”6. Y a partir de ese momento todo es un juego, una burla que le adviene al propio Avito; le adviene, le llega, no la planea. De tal modo que Avito queriendo imponer la lógica de la ciencia está, tam­ bién él, como Marina dentro de la lógica del juego, pero sin saberlo. Y sinceramente este cambio de lógicas, me parece un verdadero juego de Unamuno en su novela. Por eso es realmente un diverti­ mento. Y un divertimento que no admite la lógica de la ciencia. Por eso a Unamuno no se le puede interpretar bajo ese tipo de lógica. Y ¿qué responder a eso de que Unamuno dijera en el Prólogo aquello de que si esta novela será una broma, un divertimento tan solo? Pues que sí; es todo eso, y más después de oír estas palabras de Unamuno en este mismo Prólogo: “ parece fatalmente arrastrado - e l autor- por elfunesto prurito de perturbar al lector más que de di­ vertirle y sobre todo de burlarse de quienes no comprenden la burla ” (172). Si hemos comprendido que esta novela es una burla, es la mejor manera de librarnos de la burla de su autor. Sócrates sí comprendía la burla, Machado, también. El primero, como buen burlador (así lo llaman sus contertulios) la usa para hacer pensar, y Machado, la ironía, para distanciarse de sus opiniones y así librarse de su propio dogmatismo, de tal modo que el interlocu­ tor no reciba las opiniones como definitivas y le ahorren su propio pensamiento. Que esta novela y sus personajes son caricaturas, lo sabe de cierto Unamuno cuando en carta a Santiago Valentí (6-2-1902), a propósito de que éste la comenta que Álvarez Dumont va a hacer los dibujos de su novela, le dice: 6 I. CRIADO MIGUEL, Las novelas de Miguel de Unamuno, Ediciones Univer­ sidad de Salamanca, 1986, 18. NAT. GRACIA LDC 2/mayo-agosto, 2012, 313-339, ISSN: 0470-3790 329