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SAN FRANCISCO EL REAL, DE SALAMANCA. EL BICENTENARIO al que seguía una bóveda artesonada y bajo él, sobre la puerta adin­ telada, en una hornacina, estaba la estatua de San Francisco. En los ángulos que deja el arco de entrada, las llamadas enjutas, había bajorrelieves regulares, representando de forma alegórica: la Fe, la Esperanza y la Caridad. El segundo cuerpo, de orden compuesto, era de peor gusto y lo coronaba un frontón triangular. A las pilastras de este cuerpo les sobraba anchura y carecían de esbeltez. En la hornacina, bajo el mencionado frontón, había una estatua de la Virgen María, bajo la advocación de Inmaculada Concepción, con el famoso versículo a sus píes: “Tota pulchra est María et macula non est in te”, grabado en caracteres grandes. El templo era espacioso, de los más grandes de Salamanca, de estilo gótico y formado por tres largas naves con cinco arcos y seis bóvedas de crucería cada una. La cúpula, los altos arcos apuntados, los pináculos y las cresterías, correspondían a la última época del gótico, todo fabricado en hermosos sillares de piedra. El claustro era de estilo renacentista, muy espacioso, y lo formaban dos pisos o ga­ lerías con arcos de medio punto, levantados sobre esbeltas columnas y revestidos de escudos y medallones. Así pues, en este gran edificio hubo tres estilos arquitectónicos: el gótico en la iglesia, el renacentis­ ta en su claustro y el greco-romano en la facha de la iglesia. Las municiones y pertrechos de guerra conquistados tras la toma de los fuertes franceses se guardaron en una panera (silo) sita en la calle de la Esgrima, detrás del Convento de San Francisco, usado de cuartel por los aliados, en espera de su traslado a Ciudad Rodrigo. El día 6 de julio de 1812 voló la panera, destrozando el barrio de las Peñuelas de San Blas, matando e hiriendo a unas 600 personas, entre paisanos y militares. Fernando de Araujo34 nos lo cuenta: “Se dice que la noche del 6 el cura Pando se quedó a dormir en el cuerpo 34 Dr. D. Joaquín Araujo, clérigo castellano. En la “Guía del Estado Ecle­ siástico Seglar y Regular en España” de 1816, aparece citado como “ capellán mayor curado, con silla alta en el coro y capa coral. Enterrado en la capilla de San Segundo de Ávila". NAT. GRACIA LIX 2/mayo-agosto, 2012, 289-311, ISSN: 0470-3790 307