PS_NyG_2012v059n002p0197_0257

FERNANDO URIBE Damián calificado de poco sólido, como la leche que se les da a los niños, por lo cual, según el Papa, no merecía que fuese tomado como una Regla propiamente tal, pues la princesa de Bohemia le había pedido que le aprobase para su naciente monasterio la “Forma de vida” que se observaba en S. Damián. Este documento no se conoce, pero según Lazzeri, el Papa Ino­ cencio III no sólo le concedió a Clara el Privilegium p au p ertatis sino que le aprobó su “Forma de vida”. Para darse una idea sobre cómo era ese documento, hace una comparación entre lo que él llama la “Forma o Regla de Francisco”, o sea la proto-Regla que escribió para los hermanos y la RegCl anterior a 1224 con la siguiente suposición: “la primera Forma o Regla” de santa Clara no debió ser otra cosa que un calco de “la primera Forma o Regla de san Francisco”; da casi por seguro que estaba dividida en doce capítulos como la RegB o defini­ tiva, con elementos literarios iguales y con idénticas rúbricas en los capítulos que tenían el mismo tema (cf. p. 94). Es evidente que, al partir de suposiciones sobre un texto que no ha llegado hasta noso­ tros como la proto-Regla, los argumentos y conclusiones del autor en este punto son muy débiles. 5) El último punto está dedicado a la composición de la “prime­ ra forma de vida”. Aquí el autor reporta un largo texto de la crónica de Mariano de Florencia relacionado con el viaje de Francisco a Es­ paña, su regreso a Italia y su actitud ante los nuevos monasterios de monjas fundados por los frailes que encontró a su regreso. El cronis­ ta dice que fue en esta ocasión cuando Francisco escribió para Clara la “Forma de vida” y la nombró abadesa. Basándose en estos datos, Lazzeri dice que este documento debió ser escrito alrededor de 1214 y seguramente antes del Concilio Lateranense IV (1215). Luego hace un largo excursus para demostrar que durante esos años (1214/15) ya Clara aparece con el título canónico de Abadesa que, por lo mis­ mo, supone la existencia de una Regla o Forma de vida de carácter oficioso, no oficial, que debió ser compuesta entre 1215/16 cuando el Papa Inocencio, el cardenal Hugolino y Francisco se encontraron en Perusa. Hay que decir que su reconstrucción, basada en la cró- 214 NAT. GRACIA LIX 2/mayo-agosto, 2012, 197-257, ISSN: 0470-3790