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EL PECADO ORIGINAL, CLAVE PARA ENTENDER EL MUNDO DESDE LA FE De la evidencia de que el pecado -original o el posterior en la historia- no es algo intrínseco a la misma naturaleza, sino fruto de una decisión libre, se sigue que la esencia del hombre, como tal, es libre e inocente en su primer momento. Por tanto, la relación original del hombre con Dios en la misma creación no fue del hom­ bre esencialmente pecador. Habrá pensadores, que, reconociendo la dificultad histórica del hombre inocente en el paraíso, lo sitúan en una nostalgia de algo puro que debió ser y no ha sido. Sólo, en su existencia, un segundo acto de conciencia del hombre pudo ser de rebelión. Cristo, inicialmente predestinado en un mundo pensado de otra manera, se encontró con un mundo deteriorado que necesitaba ser restaurado. Él mismo dice de sí mismo, que el Hijo del hombre ha venido a buscar y salvar lo que estaba perdido (.Le 19,10). 12. LA GRACIA MISTERIO DE LIBERTAD En todos nuestros juicios sobre lo que aceptamos por revelación de Dios, nos hallamos en la encrucijada del don gratuito (libertad de Dios) y de la propia libertad. Nuestra libertad nos hace responsables del rechazo de un don que Dios libremente ofrece, pero que pue­ de no ofrecer. La humanidad no pecadora, según la visión paulina recogida en la escuela de Escoto, entraba con Cristo en el proyecto inicial de la creación. El pecado, consecuencia de la rebeldía del primer hombre, la dejó apartada voluntariamente de su fin y, por ello, enferma de muerte en su propia incapacidad de levantarse. Dios quiere que el hombre, como castigo saludable de su insolencia, ex­ perimente la gravedad de su transgresión, que se ve acrecentada en una historia en que Dios, como promesa en el Antiguo Testamento y como presencia en el Nuevo, mantiene en Cristo el destino huma­ no previsto desde el principio. El contraste provocado por la propia desobediencia deja a la humanidad descentrada sobrenaturalmente y debilitada en las mismas fuerzas naturales. No se puede ocultar la realidad de una enfermedad congènita en virtud de algún virus infi­ cionando la libertad actual o virtual en todos los generados en este NAT. GRACIA LVIII 3/septiembre-diciembre, 2011, 669-694, ISSN: 0470-3790 687

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