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PARA UNA TEORÌA ACTUAL SOBRE LA VERDAD Heidegger tiene un concepto particular de verdad ontologica. Como se ha dicho, Heidegger entiende la verdad corno desoculta­ ción. La verdad descrita hasta ahora como verdad ontologica es para Heidegger verdad óntica, verdad del ente; y correspondería al carác­ ter de desoculto del ente, que el hombre debe respetar, dejando al ente ser el ente que es. La verdad ontologica es la verdad del ser, la iluminación o apertura del ser. Es ésta la que hace que el ente sea ente. Todo ente y el hombre mismo, que es el lugar en el que se da la iluminación, tienen que entrar en esa verdad del ser. Habría por tanto una verdad del ser, que es la verdad ontologica y que es el fundamento de toda verdad; una verdad óntica, que es la verdad del ente; y una verdad en el hombre, que vendría a ser la verdad lógica, aunque no es una simple adecuación, como veremos. Las tres se dan en un proceso o acaecer. Algunos autores, como Coreth o Lotz, han asumido esta triple división de la verdad106. En resumen: Habría que distinguir varios niveles en la verdad ontològica. Uno como adecuación al intelecto divino; un segundo, como adecuación a un mundo superior inteligible, en sentido plató­ nico; y un tercero, como lo en sí o la esencia de los entes o de las cosas. Desde un punto de vista puramente filosófico sería el tercero el que hay que considerar como punto de partida. Que las cosas sean algo en sí y que se pueda hablar de una verdad ontologica en este sentido parece aceptable; aunque parece más adecuada la termi­ nología de Heidegger, quien a esta verdad la llama verdad óntica. En cualquier caso, esta verdad no se da de una manera clara y distinta. En primer lugar, porque el sujeto humano que la percibe tiene sus limitaciones y la va conociendo en un proceso. Esto lo admitía ya Santo Tomás. Pero esta idea se ha acentuado en la filosofía moderna, sobre todo en Heidegger. Según él, el mismo ser es acaecer; la ilumi­ nación y apertura del ser es un proceso. La misma verdad ontologica (en sentido heideggeriano) es dada en un acaecer; y dentro de ella se dan la verdad óntica y la verdad lógica. 106 Cf. E. CORETH, Metafísica , Barcelona, Ariel, 1964; J. B. LOTZ, Ontologia, Barcelona, Herder, 1963. NAT. GRACIA LVIII 3/septiembre-diciembre, 2011, 491-541, ISSN: 0470-3790 531