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MANUEL LÁZARO PULIDO Duns Escoto profundizará en la lectura ricardiana del concepto metafisico de persona, que evita la ambigüedad de la definición de Boecio 78 y como consecuencia subraya el carácter original del indi­ viduo. Escoto vinculará por cuestiones cristológicas el concepto de persona a la existencia. Pero, para nuestros intereses, quisiéramos aquí subrayar la tensión que el concepto de persona tiene en el maestro escocés, entre los polos más íntimos y comunicables, como ha señalado Enrique Rivera de Ventosa79. Lo que Escoto hace es imprimir definitivamente en su carga metafísica la dignidad absolu­ ta de la persona en su individuación y originalidad, en su soledad metafísica que no psicológica80. Temática radicalizada más tarde por Guillermo de Occam, quien llegará a negar la esencia del singular sólo dotado de existencia, transformando el ente unívoco en ente singular81. Sin embargo, la singularidad escotista no cae en la mera singularidad, sino que quiere aliviar racionalmente la tensión ente individualidad y comunicabilidad. Liberar a la persona de la cosifica- ción de la esencia, subrayando su voluntad y deseo como principio fundamental de la personalidad, que se proyecta en acción y que está definida íntimamente por ser libre82. La soledad de la persona es “diferencia existencial”, lo que nos hace a cada persona en cuanto personas diferente. La absoluta incomunicabilidad de la persona a la que se refiere es la divina. En el hombre la persona por su con­ tingencia está concebida para no negar el que sea personado por una persona extraña. Escoto radicaliza la postura bonaventuriana 78 “ Corrige la definición de Boecio, que dice que la persona es 4a sustancia indivisible de naturaleza racional», porque así se seguiría que el alma es persona, lo cual es erróneo ” (DUNS ESCOTO, Ordinatio /, q. un. n. 15: Vaticana V, 355-356). 79 E. RIVERA DE VENTOSA, “ Dobleplano metafisico de lapersona en lafilo­ sofía de Duns Escoto y su interpretación en elpensamiento actual ”, en Deus et homo ad mentem J. Duns Scoti. Acta Tertii Congressus Scotistici Internationalis , Roma, Societas Internationalis Scotastica, 1972, 293-315. 80 DUNS ESCOTO, Oxoniense III, d. 2, q. 1: Vivès XIV 45a.; Ibid., III, d. 1, q. 1, n.17: Vivès X3V 17a. 81 GUILLERMO DE OCCAM, III Sent., I, d.2, q. 9, 5-336. 82 I. G. MANZANO, In via Scoti: la via «lib erta tis en L. SILEO (ed.), Via Scoti. Methodologica ad mentem foannis Duns Scoti: Atti del Congreso Scotistico Intemazio­ nale Roma 9-11 marzo 1993 , Roma, PAA - Ed. Antonianum, 1995, 245-259. 448 NAT. GRACIA LVIII 2/mayo-agosto, 2011, 419-453, ISSN: 0470-3790