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MARTÍN LUTERO Y LA MÚSICA DE LA REFORMA Antes, en 1508, su superior de los agusti­ nos y padre espiritual, Johann von Staupitz (que hasta su falleci­ miento en 1524 mantu­ vo una buena amistad con Lutero) le encaminó hacia el estudio de la Sagrada Teología en la Universidad de Witten- berg, recién creada, donde se gradúa como “Baccalaureus biblicus” (1509) y poco des­ pués es ya “Baccalaureus sententiarius”. Precisamente el paso por las Sentencias de Pedro Lombardo y el franciscano William o f Ockham (que resaltaba la libertad de Dios y del hombre, punto clave en el concepto luterano de “justificación”) dejarían profunda huella en su Teología. Tras el lapso del viaje a Roma (donde se escandaliza por la degeneración de la curia romana), Staupitz lo reenvía a Wittenberg a doctorarse en Teología, dignidad académica que le es colacionada en 1512,y asume la cátedra de “Lectura bíblica” de esta universidad que mantienehasta su muerte. Protocolariamente es conocido en la cultura alemana como Dr. Martin Luther. En el ardor dialéctico, Lutero va ampliando el tema inicial so­ bre las “Indulgencias”, para terminar planteando cuestiones de ma­ yor calado, que le habían deparado grandes conflictos personales y atormentadas vivencias y escrúpulos, a pesar de sus prácticas peni­ tenciales diarias en sus primeros tiempos de monje (el 17 de julio de 1505 entra en la Orden Agustiniana de Erfurt y el 4 de abril de 2007 es ordenado sacerdote). Su conciencia se debatía por encontrar cómo alcanzar la gracia divina necesaria para alcanzar la justificación salvadora. Sus dudas sobre el perdón de sus pecados se resuelven cuando, según propia confesión, recibe en la torre del convento la “iluminación” ( Erleuchtung ), experiencia que le liberó de sus dudas Universidad de Wittenberg en 1644 NAT. GRACIA LVIII 2/mayo-agosto, 2011, 243-322, ISSN: 0470-3790 251

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