PS_NyG_2011v058n002p0243_0322

MARTÍN LUTERO Y LA MÚSICA DE LA REFORMA Tenía tal significación esta conmemoración, que dos siglos des­ pués Johann Sebastian Bach (genio absoluto de la música en general y de la luterana en particular) tenía que interpretar en este día can­ tatas que precedían o seguían al sermón del solemne Gottesdienst o misa, con el que se vinculaban muy directamente mediante una cui­ dadosa y previa selección de textos. Aparte de las que se perdieron, se conservan tres originales suyas dedicadas a esta conmemoración: BWV2 76, “Die H immel erzählen d ie Ehre Gottes ” (Los cielos cantan la gloria de Dios), la BWV 80, “Ein fes te Burg ist unser Gott” (Un fuerte castillo es nuestro Dios) y BWV 79, “Gott d er Herr is Sonn und Sch ild ’ (Dios el Señor es sol y escudo), compuesta para el 31 de octubre de 1730, año en el que se conmemoraba el segundo centenario de la “Confessio Augustana3” , que redactada por Melanchton, los Príncipes y ciudades adeptos a la causa reformista presentan al Emperador Carlos en la dieta imperial de Augsburgo el 25 de junio de aquel año. El hecho que serviría para considerar el 31 de octubre como la fecha fundacional de la Reforma es la fijación por parte del Dr. M. Lutero en las puertas de madera4 de la iglesia del palacio (la Schlosskirche ) de un escrito que contendría la invitación a una Dispu- tatio sobre cuestiones relativas al pecado, la penitencia y el perdón de los pecados en su raíz teológica y la de las Indulgencias C Ablass en alemán). No era, pues, un reto ni una ruptura, sino una invitación a clarificar, mediante una puesta en común, las cuestiones de fuerte resonancia práctica en aquel momento. Decía así la convocatoria en lengua latina (oficial de las universidades alemanas durante siglos), antes de proponer las cuestiones a debatir: 2 Es el número del catálogo de referencia de las obras de Bach (el Bach- Werke-Verzeichnis), redactado por Wolfgang Schmieder (Ia edición 1950, 2a edición, corregida, 1990). 3 El grabado de Johann Dürr presenta el acto de entrega de la Confessio Augustana al emperador. 4 Tras los grandes daños sufridos por toda la ciudad (1760) durante la “Gue­ rra de los Siete Años”, incrementadas por las “Freiheitskriege” (Guerras de Indepen­ dencia) contra Napoleón, la iglesia había perdido las puertas sobre las que Lutero habría clavado sus tesis. El 10 de noviembre de 1858 (375 aniversario del nacimiento de Lutero) el rey de Prusia Federico Guillermo IV inauguró solemnemente las nue­ vas puertas de bronce fundido, sobre las que se grabaron las “Tesis”. NAT. GRACIA LVIII 2/mayo-agosto, 2011, 243-322, ISSN: 0470-3790 245