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APORTACIÓN DE SAN BUENAVENTURA A UNA “FILOSOFÍA MEDIEVAL.. de un día, pero no en nuestro contemporáneo uso del día (mañana, tarde, noche), sino en el uso litúrgico del mismo, dominante en su tiempo (tarde o víspera, mañana y mediodía). Todo el recorrido tie­ ne validez en el desvelamiento de la realidad, pues la víspera ya es litúrgicamente el día, pero nos lleva a la culminación, el momento en el que el Misterio se hace visible. El recorrido temporal es correlato de la invocación al Crucificado que nos conduce de forma visible a la contemplación del Misterio, pues el mismo Cristo comprende la sustancia corporal, espiritual y divina (n. 3). Y en este recorrido la mens es protagonista; esta mente se des­ pliega al tiempo que ataca diferentes realidades. Cada objeto (obje­ tos corporales externos - dentro de sí y hacia sí - sobre sí) que le es propio es cubierto por un aspecto (sensualidad - espíritu - mente) (n. 4) y cada realidad puede ser vista desde (alfa, origen, por espejo, unida a otra conexa) o en sí (omega, en espejo, en su puridad), Es decir, los objetos son considerados por la mente de una doble ma­ nera: desde su aspecto fenomenológico -desde donde se nos hacen presentes-, y en su profundidad significativa y de sentido -en su presencia-. Se desdoblan los objetos en su propia profundidad y se crean, así, seis grados a los que le corresponden seis potencias del alma (utilizando la palabra anima): sentido e imaginación para las cosas sensibles (vestigio); razón y entendimiento para las cosas in­ teligibles (imagen); inteligencia y sindéresis (apéndice de la mente) para la contemplación de la realidad trascendente (idea de la reali­ dad trascendente mediante semejanza, cap. 7). Esta doble dimensión del objeto que recorre la mente implica tanto un camino hacia Dios, como, sobre todo, al decir de Orlando Todisco, “un pensar la cosa en Dios’*26, porque a Dios lo hemos intuido, lo que se pretende es co-intuirlo y contemplarlo, superar la falta que tenemos, la carencia (nacida del pecado), de ahí la alegría de la búsqueda. Resumimos estas ideas en el siguiente cuadro: 26 O. TODISCO, Lettura epistemologica dell’esistenzialismo di S. Bona­ ventura, en A. POMPEI (ed.), San Bonaventura maestro di vita francescana e di sapienza cristiana , voi. Ili, Roma, Pontifica Facoltà Teologica “San Bonaventura”, 1976, 67. NAT. GRACIA LVII 3/septiembre-diciembre, 2010, 499-534, ISSN: 0470-3790 521