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COGNICIÓN Y FELICIDAD EN EL ENVEJECIMIENTO deterioro con el paso de los años, especialmente, en aquellas tareas que requieren un nivel de procesamiento mayor, como la atención dividida, sostenida o selectiva (Antón, 2007). De esta manera, si presentamos las distintas modalidades o tipo­ logías de la actividad atencional, podremos establecer qué cambios ocurren en el proceso de envejecimiento en cada una de ellas. La atención sostenida o vigilancia consiste en la capacidad de una persona para realizar una actividad durante un periodo de tiempo sin que aparezcan errores como consecuencia de la fatiga. Dicho de otro modo, permanecer alerta ante determinados estímulos durante intervalos de tiempo prolongados (Diaz, Martín y Peratia, 2006). Se­ gún algunas investigaciones (See, Howe, Warm y Dember, 1995), el proceso para mantener la atención durante largos períodos de tiem­ po no presenta ningún cambio con la edad. Así, al realizar una tarea de vigilancia, mayores y jóvenes cometen más errores cuanto más tiempo transcurre, no presentando diferencias en la velocidad con la que disminuye esta precisión. Sin embargo, las personas mayores sí son menos precisas que las personas jóvenes, de forma absoluta. Una explicación bastante coherente habla de unos niveles de alerta más bajos en los ancianos que en los jóvenes, que les lleva a contestar de manera más lenta. Y también establece la presencia de un nivel de arousal aumentado en las personas mayores, traducido en un mayor nerviosismo, cierta intranquilidad y unos niveles mayores de estrés a la hora de establecer sus respuestas, precisamente por el interés que demuestran las personas mayores en contestar correcta y rápi­ damente a los estímulos (Vega y Bueno, 2000). Otras manifestacio­ nes presentes en el proceso de envejecimiento estarían directamente relacionadas con la mayor distraibilidad que presentan las personas mayores, lo que podría provocar una ejecución más lenta de las tareas de vigilancia (Antón, 2007). Como ha quedado expuesto, la capacidad para procesar activamente la información a lo largo de un periodo de tiempo no se encuentra deteriorada en las personas mayores, sino tan sólo enlentecida (Antón, 2007). La atención selectiva se refiere a la capacidad para focalizar la atención en una parte de la estimulación que recibimos, de forma que NAT. GRACIA LVII 2/mayo-agosto, 2010, 365-397, ISSN: 0470-3790 379

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