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ANTONIO SÁNCHEZ CABACO fidai, que obedece a una esquematización de corte didáctico (se ubica fuera del grupo). - La memoria colectiva es amplia y diversa (los límites son irre­ gulares) y se sustenta sobre las tradiciones, mientras que la historia es mucho más monótona (límites claramente fijados) y se nutre de hechos y sucesos. - La memoria colectiva es el grupo visto desde dentro y la his­ toria es el grupo visto desde fuera. García Márquez señaló que la vida no es lo que uno vivió, sino lo que recuerda y cómo la recuerda para contarla. De ahí que cons- tructos como el de memoria histórica sean, a la luz de las argumen­ taciones anteriores, contradictorias desde un discurso epistemológico y científico. Las implicaciones expuestas son básicamente dos, ya que la realidad psíquica es tan importante para los seres humanos como la verdad histórica. Primero: la memoria colectiva es una construcción y reconstrucción intersubjetiva de un determinado hecho social (au­ togràfica y referencial). Segundo: el recuerdo histórico no se sustenta sobre los hechos, sino sobre la creencia que se tiene de ellos (selecti­ vidad y parcialidad). No quiero que se interprete lo anterior como justificación de le­ yes de punto final, ni amnistías. La clave de la sabiduría, que algunos buscan en la rana de la fachada de la Universidad de Salamanca, está diez metros más abajo en esa misma calle, en la Casa Museo de D. Miguel de Unamuno aludiendo a uno de sus pensamientos más uni­ versales: Primero la verdad que la paz. Sentencia que es de rabiosa actualidad, tanto en el plano individual, como social. Por tanto, la memoria se erige como un antídoto contra el enga­ ñoso poder de la historia (Blanco, 1997). La memoria colectiva posee un carácter normativo, actúa como patrón de conducta de los miem­ bros del grupo. Ésta, quizás, sea la razón del permanente intento de control y manipulación de la misma. ¿Cómo se producen individual y socialmente estas manipulaciones? La respuesta requiere introducir en la escena la dimensión emocional de la conducta humana. 348 NAT. GRACIA LVII 2/mayo-agosto, 2010, 341-364, ISSN: 0470-3790