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ÁNGEL GALINDO 5.3. L ib e r ta d e ig u a l d a d La Iglesia se esfuerza en buscar la libertad de acción dentro de la sociedad, tanto en el ejercicio de su misión, como en la proclamación de la palabra. Pide esta libertad para todos los ciudadanos, tanto en la búsqueda de la verdad, como en el ejercicio de la responsabilidad: “En el ejercicio d e su libertad, el hom bre no p u ed e desligarse d e re­ fe r en c ia s objetivas, comprom isos y responsabilidades, d e tal m an era qu e su actu ación no se p u ed e d isocia r d e los imperativos y exigencias que, p a r a bien suyo, h an sido inscritos p o r Dios en su mismo ser p e r ­ sonal, en la n atu raleza d e sus actos y en las dem ás realidad es d e la c r e a c ió r í’(VhL. 3S). Esta responsabilidad libre puede ejercerse con otros grupos so­ ciales. Pero especialmente y de forma específica son los laicos quie­ nes solidariamente han de realizar esta noble tarea. La solución de la crisis moral de la sociedad actual es tarea de todos. 5.4. P e r s o n a y s o c ie d a d El dualismo individuo y sociedad aparece con frecuencia en la reflexión que se hace la Iglesia sobre el clima moral de los ciuda­ danos. Muchas veces lo harán valorando la dignidad de la persona humana en contra del afán intervencionista de los poderes y de la superación de la sociedad por encima del hombre: uEl Estado y los p o ­ deres públicos, adem ás, no pu ed en tratar d e imponer, en el conjunto d e la s o c ied a d determ inados modelos d e condu cta qu e implican una fo rm a defin ida d e en tend er a l h om b re y su d estin ov(VhL. 64)85. Reiteradamente se plantea la cuestión desde las exigencias de participación en las estructuras por parte de los cristianos. Éstos, va­ lorando las circunstancias y sus posibilidades e inspirándose en la Doctrina Social de la Iglesia, no pueden manipular a la Iglesia con 85 Cf. A. GALINDO GARCÍA, Algunos retos actuales . .. O. c., 271-282. 264 NAT. GRACIA LV1I 2/mayo-agosto, 2010, 203-265, ISSN: 0470-3790