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MODESTO BERCIANO sus grandes capacidades y posibilidades. El hombre ha proyectado esta esencia, haciendo de ella un ser transcendente, Dios. Nótese bien que Feuerbach no sólo niega a Dios, sino que, ante todo, afir­ ma el hombre y quiere sustituir a Dios por el hombre. Por eso, el ateísmo de Feuerbach, antes que un ateismo -que lo e s - quiere ser un antropoteísmo10. Seguidor de Feuerbach, fue Carlos Marx, fundador del marxis­ mo. De una manera explícita, Marx vio el tema de Dios más bien desde el punto de vista sociológico. Pero más importante y radical que la sociología es la visión materialista de la realidad, del hombre y de la historia. Para Marx y Engels, el origen de todo es la materia, una materia sin Dios. El hombre y todas sus creaciones: las ciencias, las ideologías, la filosofía, el derecho, la política, la religión, etc. son producciones de la materia. Por otra parte, Marx afirma que el hom­ bre actual vive alienado y sometido a las clases dominantes. Para salir de la alienación, hay que cambiar la sociedad. Y como todo depende de la materia, hay que empezar por cambiar las condicio­ nes materiales, los medios y los modos de producción, que a su vez llevaran a nuevas relaciones de producción, a cambios sociales y a un cambio de las superestructuras culturales. Y hay que eliminar la religión, que justificaría el orden establecido. Es sabido que Marx consideró la religión como opio del pueblo. Mediante ella, se con­ suelan las clases dominadas, porque, después de esta vida, esperan tener una vida mejor. Y después de Marx, Lenin afirmó que la reli­ gión es no sólo opio del pueblo, sino “opio para el pueblo”. Serían los ricos o la clase dominante los que la proporcionarían a la clase dominada para tenerla tranquila11. Todos conocemos la enorme difusión que han tenido las ideas de Marx en el siglo XX. También tenemos noticia de la oposición y persecución de la religión por el marxismo o comunismo, sobre todo en los países de Europa oriental, de China y de otros lugares en los 10 Cf. M. CABADA CASTRO, El humanismo premarxista de Ludwig Feuer­ bach, Madrid, BAC, 1975 11 Cf. K. MARX - F. ENGELS, La sagrada fam ilia, Madrid, Akal, 1981; ID., Ideología alemana, Madrid, Magisterio Español, 1976. 578 NAT. GRACIA LVI 3/septiembre-diciembre, 2009, 569-598, ISSN: 0470-3790

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