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ANTONIO LLAMAS The author of the Book of Revelation is a Jew who explains Jesus by way of the Jewish procedures, recourse, and techniques of interpretation. Our study consists in contemplating one of the texts of Revelation which, to our eyes, shows the triumph of the Lamb over the forces of evil. Thus, the sacred author manifests to primitive Christianity, the divinity of the Lamb, that is to say, of Christ (Rev. 5:6-14). The context and the exegetical analysis of the text have permitted us to verify the recourse to the Old Testament, as well as to other Jewish writings, and, above all, to Rabbinic literature. Also, the exegesis allows us to glimpse the procedure realized by the author of Revelation. The procedure used is the fulfillment in Christ of the divine prerogatives, granted to God in the Old Testament. Our investigation gives us a glance at the Jewish techniques of which our author makes use, in order to show the Christians of that time the Lamb’s qualities, his functions and peculiar characteristics, in such a way that they all determine his divinity. KEY WORDS: Apocalypse, the divinity of the Lamb, the procedure used is the fulfillment in Christ o f the divine prerogatives, Revelation of St John. El libro del Apocalipsis se sirve de una serie de imágenes y figuras literarias para describir un símbolo, cuya vida hemos de descifrar si queremos contemplar el vasto bosque literario en el que se introduce el autor del libro. Uno de los símbolos que nos parecen más sugesti­ vos es aquel del cordero. Esta imagen literaria nos resulta lógica para narrar y describir de una manera original la personalidad de Jesús a lo largo de la obra. Esta manera de narrar es denominada por algunos modernos retórica y política2. De suyo, la narrativa del Apocalipsis nos muestra la imagen li­ teraria del Cordero. Esta imagen literaria prefigura a Jesucristo y es rica en contenidos, cuya trascendencia es uno de los títulos dados a Cristo, con un gran alcance cristológico en el primitivo cristianismo, sobre todo, en la asamblea litúrgica, en las confesiones de fe y en la Eucaristía. Cristo es llamado Cordero de Dios, no sólo en la tradición bíblica neotestamentaria, sino también en la Iglesia que celebraba la muerte sacrificial, la salvación de la comunidad, de tal manera que 2 Cf. D. E. BARR (ed.), The reality o f Apocalypse. Rhetoric and Politics in the Book of Revelation, Atlanta, Society of Biblical Literature, 2006. 428 NAT. GRACIA LVI 3/septiembre-diciembre, 2009, 427-480, ISSN: 0470-3790