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EL TRIUNFO DEL CORDERO EN EL APOCALIPSIS por Jesús, como cumplimiento de las antiguas promesas, según las Escrituras. Así se unifican los escritos del Nuevo Testamento. “Los apóstoles tienen que proclamar el mensaje de Cristo y explicarlo: para ello, siguiendo el ejemplo del Maestro, se vuelven al AT, lo leen a la luz del misterio de Cristoglorificado, y, al explicarlo con esta nueva luz, explican ese mismo misterio de Cristo. Los escritos del Nuevo Testamento, registro de la predicación apostólica, son en gran parte interpretación del ATdesde el centro, que es Cristo”59. Kal oüóéÍc; éów aio kv ico oúpavto oúóe €tt! xf\c, yf\c, oúÓ€ uttokíxtü) zf\c, yf|(¡ á v o l& i tó pipAiov oike p^iueiv aireó. Y nadie, ni en el cielo, ni en la tierra, ni debajo de la tierra, podía abrir el libro ni mirar su contenido (Ap 5, 3)- El autor, nos conduce en la narrativa de la visión celeste del Cor­ dero a una ulterior reflexión. Nadie puede abrir el libro, ni mirar su contenido, e indica el espacio temporal: cielo, tierra y abismo. Estos tres términos van de mayor a menor, porque el simbolismo cósmico invade la redacción del apocalíptico. Las tres divisiones abrazan toda la creación y nadie puede abrir el libro, perteneciente a estos espa­ cios40. De una parte, el cielo indica la trascendencia, la esfera divina, el ámbito de Dios, como ya leimos en el capitulo anterior el trono de Dios (Ap 4). De otra parte, la tierra es el lugar de los hombres y nadie tiene capacidad para leer y descifrar el libro de los sellos. Más aún, el redactor añade el término debajo de la tierra, esto es el abis­ mo, la sede del mal y de los monstruos y las bestias. Este lugar, es la sede del imperio de los muertos y de los demonios subterráneos41. Otros autores creen que esta división tripartita se fundamenta en un pasaje del libro del Éxodo que el apocalíptico relee, para explicar la negatividad que de muchas maneras especifica el Hades (Ex 20, 39 L. ALONSO SCHÓKEL, El Antiguo Testamento incorporado al Nuevo , en Comentarios a la Constitución “Dei Verbum”sobre la divina revelación, Madrid, BAC, 1969, 533. 40 W. J. HARRINGTON (ed.), Revelation , 84. 41 E. B. ALLO, LApocalipse , París, Gabalda, 1933, 75. NAT. GRACIA LVI 3/septiembre-diciembre, 2009, 427-480, ISSN: 0470-3790 443