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EL LENGUAJE SOBRE DIOS EN JUAN DUNS ESCOTO que atribuimos a Dios son conceptos formados a partir de las criatu­ ras, que, luego, a través de una suerte de purificación metafísica, los atribuimos a Dios. Ningún concepto distinto corresponde en noso­ tros a la esencia divina. La idea fundamental subyacente a su concepción del signifi­ cado del lenguaje sobre Dios es que el pensamiento se mueve en el lenguaje, es decir, en un sistema de signos. Los cuales se refieren a las cosas lo mismo que el letrero de una fonda indica el vino que hay para beber en dicho local. Los conceptos y las palabras señalan a Dios, lo mismo que el cartel de la fonda indica el vino, y son algo real, pero Dios o el vino son más reales. Duns Escoto parte.de una dualidad entre pensar y ser, entre lenguaje y realidad. Los concep­ tos o los nombres no se identifican con la esencia de la cosa misma (Dios y el mundo). Más aún, nuestros pensamientos y palabras en sí mismos no apuntan más allá de este mundo. Pero con nuestro pensamiento, aun siendo conscientes del abismo que nos separa del perfecto conocimiento de la esencia divina, podemos remontarnos a Dios. Los tres primeros capítulos de su tratado De primo principio constituyen una demostración de la pensabilidad de Dios. Nos invita al pensar radical. Lo hace presen­ tando a Dios no como realidad-objeto de conocimiento, sino como realidad fundamento de lo existente. José Antonio Merino resume este procedimiento intelectual con una gran sencillez y brevedad: «Dios es la solución del problematismo de la existencia humana y mundana A Se habría anticipado a Zubiri. El problema de Dios, en tanto que problema, no sería un problema arbitrariamente planteado por la curiosidad humana, sino que sería la realidad humana misma en su constitutivo problematismo. Dios sería la única realidad que se revela siendo, porque resulta absurdo a la mente la imposibilidad de lo posible. Escoto nos invita a profundizar en la experiencia de lo necesario porque sólo este tipo de experiencia nos lleva a la experiencia de la posibilidad del ser absoluto. Para pensar a Dios hay que remontarse con el entendi- 6 Juan Duns Escoto..., 72 . NAT. GRACIA LVI 1/enero-abril. 2009. 159-176. ISSN: 0470-3790 163

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