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CARLOS BAZARRA corazón, con toda el alma y con todas las fuerzas. Será la locura de los enamorados: “Ya no guardo ganado, ni ya tengo otro oficio, pues ya sólo en amar es mi ejercicio” (S. Juan de la Cruz)"8. Síntesis: Servicio y Potestad. Recordemos el pensamiento del Vaticano II acerca de los presbíteros. Refiriéndose a la naturaleza del presbiterado afirma: ”El SeñorJesús hace partícipe a todo su Cuerpo místico de la unción del Espíritu con que fue Él ungido, pues en él todos los fieles son hechos sacerdocio santo y regio, ofrecen sacrificios espirituales a Dios...No se da, por tanto, miembro alguno que no tenga parte en la misión de Cristo” l19. “Lospresbíteros, tomados de entre los hombres y consti­ tuidos en favor de los hombres en lo que a Dios se refiere...conviven, como con hermanos, con los otros hombres... Los presbíteros del N.T. por su vocación y ordenación, son en realidad segregados, en cierto modo, en el seno del pueblo de Dios; pero no para estar separados ni del pueblo mismo ni de hombre alguno No podrían ser ministros de Cristo si no fueran testigos y dispensadores de una vida distinta de la terrena, ni podrían tampoco servir a los hombres si permane­ cieran ajenos a la vida y condiciones de los mismos” 120. “Los otros sacramentos, así como todos los ministerios eclesiásticos, están ínti­ mamente trabados con la sagrada Eucaristía y a ellos se ordenan. En la Eucaristía se contiene todo el bien espiritual de la Iglesia, a saber, Cristo mismo... Es, pues, la sinaxis eucarística el centro de toda la asamblea de los fieles que preside el presbítero” ,21. “Los presbíteros, según su parte de autoridad, reúnen, en nombre del Obispo, la fam i­ lia de Dios, como una fraternidad de un solo ánimo, y por Cristo, en el Espíritu, la conducen a Dios Padre... El deber del pastor no se limita a cuidar sólo individualmente de los fieles, sino a formar una genuina comunidad cristiana, que abarque no sólo la Iglesia local sino también la Iglesia universal... Sin embargo, ninguna comuni­ dad cristiana se edifica si no tiene su raíz en la celebración de la 118 C. BAZARRA, Ayer, Hoy y Siempre, Caracas, Paulinas, 2005, 117-118. 119 PO 2. 120 PO 2. 121 PO 5. 58 NAT. GUACIA LVT 1/enero-abril. 2009. 7-64, ISSN: 0470-3790

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