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EL ORIGEN DEL HOMBRE EN LA MITOLOGÍA BARÍ. 489 mundo, de un más allá, de un mundo divino o mundo de los ante­ pasados» 157. En segundo lugar, los mitos proporcionan a los hom­ bres modelos ejemplares para posibilitar sus actuaciones, siguiendo estables principios que le sirven para fundamentar su vida social y cultural. «Los acontecimientos que tuvieron lugar en los tiempos míticos... son religiosos en el sentido de que constituyen una his­ toria paradigmática que el ser humano tiene que seguir y repetir para asegurar la continuidad del mundo, de la vida y de la socie­ dad» 158. Los mitos narran cómo ha sido creado todo 159: el mundo, el hombre, los animales o las instituciones sociales. Revelando lo que ha ocurrido, contando cómo algo ha llegado a existir, se relata el porqué. «Al narrar cómo han venido las cosas a la existencia, se les da una explicación y se responde indirectamente a otra pregunta: ¿porqué han venido a la existencia? El ‘porqué’ está siempre imbri­ cado en el ‘cómo’. Y esto por la simple razón de que al referir cómo ha nacido una cosa se revela la irrupción de lo sagrado en el Mundo, causa última de toda existencia real» l6°. Para Eliade, «todos los mitos son variantes del mito de origen porque la creación del mundo es el modelo de toda creación. El ori­ gen del mundo es el modelo del hombre, de las plantas ...»161. En este sentido, la creación del mundo se convierte en arquetipo regu­ lador de toda creación. Y toda historia primordial tiene un comien­ zo, un mito cosmogónico, o por lo menos un mito que describe el principio, el estado germinal del mundo 162. Tal como lo muestran los relatos barí, el mundo se hallaba en los principios sin orden, sin forma, sin pobladores. 157 M . E liade , Mito y realidad, 135. Cf. P. M anchester , Etemity, o. c., 167-171. 158 M . E liade , La búsqueda: historia y sentido de las religiones, Kairós, Barce­ lona 1999, 117. Cf. B. M o o n , Archetypes, o. c., 379-382. 159 Cf. C. H. L o n g , Cosmogony, art. c., 94-100. 160 M . E liade , Lo sagrado y lo profano, 86. «El hecho mismo de decir lo que sucede revela cómo se ha realizado la existencia en cuestión (y este cómo también vale para el porqué). Pues el acto de llegar a existir es, al mismo tiempo, la emer­ gencia de una realidad y el descubrimiento de sus estructuras fundamentales«: I d ., Mitos, sueños y misterios, 13. 161 I d ., La prueba del laberinto, 164-165. 162 Cf. C. H. L o n g , Cosmogony, o. c., 94-100.

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