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258 JOSÉ M. GARCÍA LABORDA volar donde queréis; os ha dado, además, vestido doble y aun tri­ ple; y conservó vuestra raza en el arca de Noé, para que vuestra especie no desapareciese en el mundo. Le estáis también obligadas por el elemento del aire, pues lo ha destinado a vosotras. Aparte de esto, vosotras no sembráis ni segáis, y Dios os alimenta y os regala los ríosy lasfuentes para beber; los montes y los vallespara guareceros, y los árboles altos, para hacer en ellos vuestros nidos. Y como no sabéis hilar ni coser ; Dios os viste a vosotras y a vues­ tros hijos. Ya véis cómo os ama el Creador, que os hace objeto de tantos beneficios. Por tanto, hermanas mías, guardaos del pecado de la ingratitud, cuidando siempre de alabar a DiosMientras San Francisco les iba hablando así, todos aquellos pájaros comen­ zaron a abrir sus picos, a estirar sus cuellos y a extender sus alas, inclinando respetuosamente sus cabezas hasta el suelo, y a mani­ festar con sus actitudes y con sus cantos el grandísimo contento que lesproporcionaban las palabras del Padre Santo...-24. Aunque el prólogo refiere toda la historia, este fragmento es suficiente para percatarse de la sencilla y poética ingenuidad de san Francisco que F. Liszt quiere relatar en su partitura. Liszt aplica en las dos Leyendas la idea programática que ya había ensayado en los grandes Poemas Sinfónicos para orquesta. En el formato reducido del piano la música se despliega como un sen­ cillo programa que describe de forma bien realista el contenido mila­ groso de las Leyendas: la predicación a los pájaros y la caminata sobre las aguas. La obra de Liszt está llena de figuraciones arpegiadas, trinos, trémolos y apoyaturas que nos hacen recoradar la algarabía de cán­ ticos múltiples de los pájaros. En medio de estas estructuras rápidas de fusas que dominan especialmente la primera parte aparecen unos temas intercalados que hacen alusión a la predicación de san Fran­ cisco y que toman la configuración de recitativos (sin acompaña­ miento y con respuestas figurativas) y corales. Todas estas estructu­ ras motívicas y temáticas aparecen en el registro medio y alto del piano (los dos pentagramas del sistema del piano están casi siem­ pre en clave de sol ). 24 Florecillas de San Francisco, XVI. San Francisco de Asís. Escritos, Biografí­ as, Documentos de la época, o. c., p. 830.