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SALMOS DE VÍSPERAS DE LA I SEMANA 147 dad de por vida; por la tarde llanto / por la mañana júbilo (v. 6); certeza / desconcierto (v. 8); luto / danzas; sayal / vestido de fies­ ta (v. 12). Estos polos antitéticos se construyen sobre la oposición fundamental que constituye la trama del salmo: vida - muerte, o bien, tierra - sbeol, luz - noche. «El salmo lee todas las antítesis sobre las que se teje nuestra existencia justamente a partir de este par primordial y dramático, el de la ‘vida’, que es ascenso, bondad, alegría, mañana, estabilidad, danza, monte elevado, vestido nupcial, y el de la \muerte’, que es descenso, cólera, llanto, tarde, infiernos, lamentación, vestido fúnebre, inestabilidad» (Ravasi, I, 550). 2. A nálisis literario - exegético El salmo se divide en siete estrofas. Estrofasl-2: El salmo comienza con una acción de gracias y con ella termina: Te ensalzaré (exaltabo), Señor,’ (v. 2) - ‘Señor, Dios mío, te daré gracias (confitebor) por siempre’ (v. 13). El motivo se alude inmediatamente: ‘porque me has librado’, es decir, porque ‘sacaste mi vida del abismo’, porque ‘me hiciste revivir cuando baja­ ba a la fosa’. En la versión latina los verbos son muy expresivos de la acción de Dios en relación con el orante enfermo: ‘extraxisti me’ (como se extrae el agua de un pozo con un cubo), ‘eduxisti ab inferno animam meam ’, ‘vivificasti me, ut non descenderem in lacum ’. Las referencias simbólicas giran en torno al movimiento de ascender y descender, bajar y sacar, como expresión de muerte y vida. Pero poniendo el acento en el triunfo de la vida: sanar, revivir. La alusión a los enemigos hay que entenderla en el contexto bíblico de la retribución: como la enfermedad se consideraba castigo por el pecado, los que ponían de relieve, o sencillamente, recordaban ante el enfermo, quizás a modo de mortificación, esta creencia son esos ‘enemigos’, como los amigos de Job (cf. Sal 30, 12; 12, 5; 24, 2; 34, 15.19.24; 37, 17; 88, 43 )26. Ante la amenaza de la muerte, de descender «in lacum», al lago de los muertos, la laguna Estigia de los griegos, que introduce al 26 Para Schókel-Camiti, -el ‘enemigo’ es quizá la Muerte personificada* (I, 473; cf. 472).

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