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52 MANUEL LÁZARO PULIDO en su materia de revelación, de este modo se representa la realidad y se participa de ella 13. Y hemos elegido esta diferenciación por dos motivos. Porque parece la más adecuada para la consideración histórica y explicar las implicaciones metafísicas y porque resulta más adecuada esta diferenciación desde una adecuada significación sacramental, y por lo tanto, teológica (explica mejor la realidad sacramental en la que se afirma que «la realidad simbólica es una realidad auténtica tanto como la realidad física»14). De este modo podemos afirmar que para Buenaventura la creatura expresa: es un signo, pero lo que se opera es, como expresa Biard hablando de la semiología medieval, una concepción simbólica del signo desde «una visión cosmo-teológica donde Dios es la palabra y el resto es signo»15. Pero antes de empezar hemos de hacer una referencia, aunque sea breve, al presupuesto filosófico en el que se desenvuelve el pen­ samiento bonaventuriano que no es otro que el de su carácter sapiencial. 2. EL CONTEXTO FILOSÓFICO BONAVENTURIANO: CARÁCTER SAPIENCIAL DE LA FILOSOFÍA DEL DOCTOR SERÁFICO J.-G. Bougerol, uno de los autores que más conoce y ha trabaja­ do el pensamiento bonaventuriano expresaba con justeza que la refle­ xión filosófica del autor franciscano era «la más medieval de la filoso­ fía del Medioevo»l6. Efectivamente, el hecho de que san Buenaventura se erige como defensor de la ortodoxia y de la tradición agustiniana ha hecho que algunas veces su figura haya sido analizada en contra­ posición al pensamiento aristotélico y que no se estudiase convenien­ temente en las aulas, como carente de interés o repetidor de teorías 13 A. O rtiz -O sé s, «Símbolo», en M. A. Q u in ta n illa (e<±), Diccionario defiloso­ fìa contemporánea, Salamanca 1976, 455. 14 J.-P. de J o n g , L ’Eucharistie. Realité symbolique. Sacram ent de l ’Unité, Latourg-Maubourg-París 1972, 31. 15 J. B iard , Logique et théorie du signe au xn?me siécle, París 1989, 10. 16 J.-G. B o u g e ro l, citado en L. P iazza, M ediazione simbolica in S. Bonaventu­ ra, Vicenza 1978, 65.