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50 MANUEL LÁZARO PULIDO ra expresa; y expresando es como se entiende su ser participado en una dinámica que va del Ser Trinitario al ser creatural en el orden ontológico, pero que desde la perspectiva epistemológica y mística va del ser creatural a la Trinidad creadora. La metodología de la expresión recorre caminos simbólicos. Varios estudios recientes, tales como los de Christopher Mark Cullen sobre la metafísica semió­ tica en el Doctor Seráfico o la teología del símbolo de Rossano Zas Friz de Col 7, han abundado en este carácter simbólico del pensa­ miento bonaventuriano señalando la actualidad y la pertinencia de estudios desde una perspectiva metafísica menos esencialista. Esta afirmación no significa que san Buenaventura no repare en la esen­ cia. Lo hace, pero, sobre todo, la supone. Su originalidad estriba en que acentuando lo fundamental, nos muestra algo más. No en vano, eso intenta hacer la Orden a la que consagra su vida: la Orden fran­ ciscana tiene la inquietud de aquilatar el dogma, pero supone y sugiere un viento fresco a la Iglesia, trayendo elementos nuevos, sin caer en la herejía. Llegados a este punto se impone una precisión metodológica que creo importante. Al hablar de signo y símbolo queremos esca­ par a cualquier consideración reduccionista del símbolo al signo, como la operada por Leinsle al considerar al primero como estre­ cho 8, ni la del signo como palabra —si bien estamos de acuerdo con este término— , pero no reduciendo todo a la identificación entre signo y palabra 9, ni del signo al de símbolo como la operada por ciertos estudiosos de la teología del símbolo en san Buenaven­ tura 10. Nosotros entendemos una integración consciente, por otro lado, que lo que entendamos por signo y símbolo resulta en cierta 7 R. Zas Friz de C o l, o . c .; Ch. M. C ullen, The Semiotic Metaphysics o fSaint Bonaventure, disertación defendida en la Catholic U. of America, 2000. 8 U. G. Leinsle, Res et Signum . Das Verständnis zeichenhafter Wirklicheit in der Theologie Bonaventuras, Munich-Paderbom-Wein 1976, 286-277. 9 W. Rauch, Das Buch Gottes. Eine systematische Untersuchung des Buchbegrif­ fe s hei Bonaventura, Munich 1961, 126, seguida por otros autores como P. Prini, «Ver­ bum divinum omnis creatura», en Doctor Seraphicus, 32 (1985), 6; O. Todisco, La crea­ ture e la parole. Da Agostino a Bonaventura, Nápoles 1994; A. Pieretti, ^ ’‘itinerarium’ di S. Bonaventura como ermeneutica ontologica», en Doctor Seraphicus, 32 (1985) 31; el mismo artículo en Revue Néoscolastique de Philosophie, 79 (1987) 313-320. 10 R. Zas Friz de C ol, o . c .; en esp ecial lo m en cio n a en la p. 287.

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