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LA IDENTIDAD CAPUCHINA EN LOS ANALES. 241 mismo. Otra cosa que percibimos al leer este relato y que pudo ser un motivo también para que el proceso de Mateo de Bascio no fructificara, se pudo dar en el hecho de que los observantes capitalizaran el culto de este santo, como podemos apreciar en el relato, y atrofiaran la causa para que así los capuchinos no consi­ guieran su cometido. A pesar de que, finalmente, no fructificara el proceso, la venera­ ción por parte del pueblo y de los propios hermanos de la Orden fue siempre muy significativa, llegándosele a tratar en adelante de «beato». Tenemos testimonios importantes que lo atestiguan: En primer lugar, el epitafio de su tumba reza así: «Hic iacet/ B.P.F. Matthaeus de Mar- chia Ord./ Min. de Obser. Verbi Dei praed. Ap./ Animam Deo reddit anno salutis 1552 nonis/ Aug.ti.» 39°. Otro testimonio importante se encuentra añadido en la primera hoja de la edición latina de los Ana­ les de Boverio, y viene a ser una especie de encomio a la persona de Mateo, en el cual se citan los momentos más característicos de su vida; el título del relato no deja de ser significativo: El B. Mateo de Bascio. Fundador de los Capuchinos 391. El fenómeno de la traslación también se describe plásticamente en el caso de fray Luis de Regio: «Con la noticia de la translación, era cosa de ver la multitud de hombres y de mugeres que acudió a la iglesia de los Capuchi­ nos pidiendo a vozes que les enseñasen el cuerpo, y aun dando a entender que avian de hazerles violencia para conseguirlo sino lo alcan^avan de otro modo. Finalmente fue tan grande el con­ curso y la instancia común que, para sossegar el ruydo que anda- va, y escusar el inconveniente que ya se temia, huvieron de sacar el cuerpo en un dia señalado y ponerle en publico a la gente, que aclamava por él. Miravanle unos y otros atonitos del celestial pro- 390 F. D’Anversa, 51. Otros dos lugares en los que se trata a Mateo de Bascio como beato son: la iglesia de san Cristóforo el convento del Santísimo Redentor de Venecia. 391 Z. Boverio, Armales I, o. c., s.p. No consta en la edición castellana. Proba­ blemente no sea un escrito de Boverio, ya que aparece añadido al primer volumen sin tener ninguna hilazón con lo demás. Motivo para creer que en la Orden había más personas, además de Boverio, que lo concebían como el fundador de los capu­ chinos.

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