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LA IDENTIDAD CAPUCHINA EN LOS ANALES.. 219 Hasta aquí la descripción del modelo de santo converso. Como se aprecia en el relato, la conversión es considerada como una gra­ cia de Dios, y ésta capacita a los neoconversos para ejercitar todo género de virtudes con el fin de purgar todas sus faltas anteriores y de buscar la perfección. Apuntamos también que es preciso tener en cuenta que las virtudes penitenciales son las más sobresalien­ tes en estos santos. 2.3. El santo gobernante Este último modelo de santo que nos presenta Boverio se basa en todos los frailes que tuvieron cargos importantes dentro de la Orden. Destacan por el hecho de haber detentado un cargo rele­ vante en la Orden, pero sobre todo por la vida virtuosa que lleva­ ron mientras gobernaban la Orden. Fundamentalmente son dos los personajes que se ajustan a este modelo de santo: Bernardino de Asti y Francisco Essino, personajes clave, ya que durante su gobier­ no tuvieron que realizar un gran esfuerzo de pacificación de la Orden. El relato de sus vidas se caracteriza por: el continuo ejerci­ cio de las virtudes, la fama de que gozaron en la Orden, el ejercicio de su cargo, caracterizado fundamentalmente por la caridad, y los milagros. Boverio no escatima en elogios hacia estos personajes; por ejemplo, cuando refiere la presencia de estos dos hermanos en el seno de los capuchinos, dice que: «... fue singular providencia de Dios a favor de la Orden de la capucha, pequeña entonces y sin rayzes, y expuesta como una planta tierna, y recien fundada... que entrassen en ella tantos hom­ bres insignes en virtudes, letras y santidad de que se hallava suma­ mente necessitada, para que la defendiessen de los peligros» 349. Se puede comprobar que el relato de Boverio está condiciona­ do por su reverencia a estos dos hermanos, y que no faltan en él todo tipo de homenajes y comentarios a favor del gobierno y de sus 349 Lib. 12, cap. VII, n. 60, p. 551.

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