PS_NyG_2001v048n001p0231_0248
236 JOSÉ LUIS LARRABE nos que conducen a Herodes. Un buen sueño por la noche siempre se agradece por la mañana: se agradece no sólo a la almohada, sino a Dios (que se vale de muchas y variadas causas segundas; entre ellas, ésta). UN BOTIQUÍN EN LA CASA En toda casa. Al menos con lo más elemental, según aquel prin cipio de que cuando algo no va bien en la salud «a Dios rogando y a los médicos obedeciendo»: ambas cosas. Y el recurso a los fárma cos —sólo en la medida de lo necesario— recuerde el recurso a Dios. En el Puente Moldavia hay una enorme estatua, de grandes proporciones y belleza, con esta inscripción: «Iesu Christo Orbis Medico» dedicada a «Jesucristo, Médico del mundo». Y viene al caso, desde la p. 24 ss. del libro que comentamos, la parábola del buen samaritano, que se nos aduce como fuente de inspiración bíblica (Le 10, 30-34). Y es que en los temas de salud y enfermedad tocamos casi inmediatamente a Dios: al Dios de la salud y de la vida. Son temas que no se viven solitariamente, sino solida riamente. En la familia se curan unos a otros, según aquello de «una mano lava la otra, las dos lavan la cara». [También en casa se puede pasar de largo... No sólo en el desierto o en la ciudad]. El libro corta por lo sano la discusión existente allí y entonces de que los que debían curar a los heridos eran los levitas y sacer dotes (me agrada). Pero también existía la tradición asiro-babilónica (de los deportados a Babilonia) de que todos debían curar a todos. Luego el libro habla también de las heridas morales, no sólo físicas. Y las «heridas» que traen a casa la televisión y otros medios de comu nicación... ¡Pobres niños y adolescentes, y pobres mayores así con tagiados! Por supuesto que tales medios, como vehículos de cultura y valores morales y espirituales, podrán ser beneficiosos si cumplie ran su misión. También un crucifijo en casa, como se sugiere en la p. 26, es de tenerse en cuenta entre los objetos de la casa como fuente de inspiración: buena inspiración del que se define como «el totalmen te dado a los demás», ejemplo de entrega en la familia y en el mundo. Y no termina la meditación de este capítulo sin que se
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz