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LÓGICA DEÓNTICA. FUNDAMENTOS ONTOLÓGICOS Y METAFÍSICOS 163 raleza del ente real. Las consecuencias de este olvido de la tradición filosófica pueden ser muy graves, y de hecho lo son. Por ejemplo, los lógicos deónticos no han podido construir un criterio firme para demarcar «norma» de «orden» e «imperativo». Todo ello ha llevado a una confusión que ha rematado en el dogma de los lógicos analíti­ cos, según el cual la norma jurídica no puede, por naturaleza, ser por­ tadora de valores veritativos, y como no lo puede ser, según su inter­ pretación, se ven obligados a concluir que la lógica de las normas es imposible y optan por una suerte de lógica debilitada, como lo es la lógica de las proposiciones normativas. Kalinowski, por el contrario, al postular que las normas son oraciones con todos sus ingredientes, hace una teoría lógica diferente respecto de la tradición anglosajona, a la cual, por lo demás, le reconoce todo su mérito. Es de notar que con este punto de vista Kalinowski intenta, además, retomar y resca­ tar para la lógica europea una tendencia secular del pensamiento lógi­ co que siempre construyó sus sistemas al hilo de una fundamenta- ción gnoseológica y metafísica, hasta que esta tradición fue eclipsada por la fuerza del formalismo característico de la tradición anglosajona. Al proponer Kalinowski un fundamento ontológico-metafísico para el concepto de norma, trae a primer plano un punto básico para la suer­ te de la lógica deóntica. Según él, Aristóteles representa un sólido punto de partida con su distinción entre conocimiento teorético y conocimiento práctico, diferenciación que da origen a su vez a la dis­ tinción entre lógica teórica y lógica práctica. La lógica deóntica tiene que ver con la lógica práctica; es más, es una región de ella. El error de la filosofía analítica ha sido, piensa, ignorar esta elemental y cru­ cial distinción. Considerada, entonces, la lógica deóntica como parte de la lógi­ ca práctica, será posible fundamentar la norma deóntica como un tipo sui generis de conocimiento susceptible de verdad o de false­ dad. En efecto, el juicio deóntico encuentra, según Kalinowski, sus últimas raíces gnoseológicas en la sabiduría moral, en la syndéresis y en la prudencia, todas ellas aptitudes del conocimiento moral, fun­ dado y guiado igualmente por la inteligencia y la razón. Como se ve, los puntos de partida de Kalinowski son totalmen­ te distintos a los de von Wright, Ross, Anderson, Alchourrón, Buly- gin, Castañeda y muchos otros lógicos deónticos, ya que asume un punto de vista iusnaturalista inspirado directamente en la teoría del