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112 PABLO REDONDO SÁNCHEZ ración de ésta, el proceso por el que llega a ser lo que ha de ser y su sentido pleno consisten en hacer transparente la situación her menéutica. Se trata, si se quiere, de un circuito en el que sus com ponentes se alimentan mutuamente. La situación hermenéutica pone el suelo adecuado para que la filosofía pueda madurar, pero ésta tiene encomendada la labor de despejar conceptualmente el terreno sobre el que se asienta. Aunque este concepto (situación hermenéutica) no se mantie ne inalterado a lo largo de todo el semestre de invierno de 1921-22, su significado general queda recogido en otros términos que inten sifican aún más su relevancia. Así se alude en otros casos a una «situación de evidencia» 35 con la que no se mienta el resultado de un proceso teórico determinado, sino una circunstancia en la que de nuevo una experiencia de carácter fundamental está contribu yendo a que el objeto del que la filosofía se tiene que ocupar se muestre propiamente tal como es. Avanzando dentro del mismo curso Heidegger no parece del todo convencido de seguir hablan do de «situación de evidencia» —término, por otra parte, muy afor tunado para lo que estaba queriendo expresar— y pasa a introdu cir, en una misma página, dos nociones que se mueven en una dirección semejante: «situación de la experiencia fundamental» y «situación de comprensión» 36. Al mismo tiempo que los presenta aprovecha la oportunidad para denunciar que el origen de muchos problemas filosóficos está en el hecho de no haber pensado a fondo y no haber hecho una apropiación expresa de la realidad que están poniendo de manifiesto los conceptos mencionados. Está insistiendo de nuevo con ello en que una de las tareas más urgen tes de la filosofía es la preparación de la situación 37. En un semes tre anterior, el de invierno de 1919-20, se pueden leer las siguien tes palabras que concretan esta idea: «Lo importante para ella [la filosofía] no es un sistema de nexos de estados de cosas, ni una red de los conceptos más gene rales [...] sino que busca la donación de situaciones concretas de 35 Ibid., p. 35. 36 Ibid., p. 38. 37 Cf. ibid.
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