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690 ALEJANDRO DE VILLALMONTE Pero leídos éstos desde la situación en la que se encuentra actual­ mente la teología católica del Sobrenatural. I. LA TEOLOGÍA DEL SOBRENATURAL EN SU HISTORIA La «sobrenaturalidad» es una característica esencial, específica del cristianismo. En su origen, constitutivos, desarrollo y consuma­ ción se presenta éste como un relato que describe la intervención libre y gratuita, «Sobrenatural» de Dios en la historia de los hombres. Pero, al propio tiempo, y con no menor intensidad, el cristianismo tiene la pretensión de ser la exaltación/dignificación máxima de la naturaleza humana. Nominalmente en hechos como la asunción de la naturaleza humana y su unión personal con el Verbo, y en la par­ ticipación final en la vida íntima de la Trinidad. En tercer lugar, y como correlato indispensable de la gratuidad y omnipotencia del Sobrenatural (de la Gracia) se proclama, con no menor intensidad, la absoluta impotencia soteriológica del hombre. Se le niega al hom­ bre cualquier suficiencia en orden a conseguir el fin último para el que se le dice haber sido creado. El marcar la diferencia y proximi­ dad, la inmanencia y transcendencia, la insuficiencia e inmereci- miento de la naturaleza frente a la omnipotencia y gratuidad de la Gracia, constituye una de las tareas máximas, arduas e ineludibles de la reflexión del creyente sobre el sentido último de su vida. Refle­ xión que se extiende a la historia del pasado y que persiste de cara a un futuro ilimitado. Por eso se comprende la importancia primaria que el tema del Sobrenatural/de la Gracia ha mantenido en la teología occidental desde san Agustín hasta hoy mismo. BdeA hace una breve alusión a este hecho (pp. 29-40). Con la intención de contextualizar, en algu­ na medida, el tema del Sobrenatural en Duns Escoto y su escuela. Con esta misma finalidad me ocupo en señalar ahora, rápidamente, un momento histórico del problema, precedente indispensable de la enseñanza escotista (y de la católica en general) tal como surge ésta a partir del siglo xin.