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644 MONTSE BARTOLOMÉ LUISES Ahora bien, la unidad divina infinita como causa eficiente nega­ tiva no es idéntica a las unidades finitas o astros que constituyen el universo infinito. La unidad primera com o primer principio es sim­ plicidad absoluta, cualquiera de sus perspectivas debe ser idéntica a sí misma e idéntica a las demás; es imposible que la unidad divina sea finita en uno de sus aspectos e infinita en otro, porque, en ese caso, no sería simple sino compleja. Como todo efecto guarda una relación de dependencia con su causa y como el arquitecto del universo es infinito, entonces el uni­ verso debe ser necesariam en te infinito 27. La unidad primera, máxi­ ma simplicidad, como causa y principio de todo lo existente, debe ser infinita, ya que si no fuera así, nada podría ser infinito, ni n e c e ­ sario; siendo infinita, no puede producir más que un universo infi­ nito de innum erables realidades, puesto que una infinita potencia que se actualizara de modo finito «sería in finitam en te envid iosa y bondad finita». La unidad primera es eterna, porque colma, rige y es todo tiem po, todo núm ero, toda esca la y toda medida, es «fin sin fin, acto sin forma » 28. Así com o nuestra potencia imaginativa es infinita — somos capa­ ces de añad ir amplitud a la amplitud, núm ero al núm ero— , del mismo modo la unidad divina en tiende en acto y respecto al uni­ verso, un espacio y un número de astros infinitos; de dicha in telec­ ción in ferim os la ex isten cia infinita tanto del esp a cio com o del número de astros. Se afirma el infinito actual en el universo: ya que el poder hacer conlleva el poder ser hecho, el ser de una potencia activa infinita deber ser infinito también 29. (...) así como realmente se encuentran cuerpos de dimensión finita, así el intelecto primero entiende el cuerpo y la dimensión. Si lo entiende, no menos lo entiende infinito; si lo entiende infini­ to y el cuerpo es entendido infinito, necesariamente tal especie inteligible existe, y por ser producida desde tal intelecto, como es el divino, es realísima; y es de tal modo real que tiene un ser más 27 Cf. Giordano B runo , o . c ., p. 394. 28 Cf. Giordano B runo , «De immenso et innumerabilibus», cit., I, 2, liber Vili, p. 293. 29 Cf. Giordano B runo , «De l’infinito, universo e mondi», cit., p. 394.

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