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ANTROPOLOGÍA. CRISTOLOGÌA. POBREZA 363 samiento de san Bernardo, la humildad es una virtud por la cual el hombre se desprecia a sí mismo por medio de su propio conoci­ miento. Es la virtud que conviene a los que ordenadamente suben hasta llegar a contemplar la verdad 18. Fiel al principio agustiniano de conocer a Dios y conocerse a sí mismo, que es, en mi opinión, una de las claves de lectura de su pensamiento, Buenaventura diseña la segunda parte del binomio agustiniano: noverim Te, desde el tríptico de sabiduría, justicia y gracia. La humildad es el fundamento de la justicia. Esta expresión tiene el sentido platónico de dar a cada uno lo suyo 19, luego asu­ mido por Aristóteles 20, que desarrolla una doctrina sobre la justicia que se hará clásica. Esta acepción de justicia ha entrado en el pen­ samiento cristiano antiguo, que, formado en las fuentes de la cultu­ ra clásica, ésta le llevó a interpretar el tema teológico-bíblico de la justicia, sirviéndose de Aristóteles. Fue el caso de san Agustín, que dejó una impronta decisiva en la historia del problema 21. Esta con­ cepción de la justicia ha sido recibida en la glosas medievales al ser­ món de la montaña 22. El adagio reddere cuique suum, que resume la noción de justi­ cia 23, aunque esta idea tiene que ser debidamente matizada. San Buenaventura inserta la justicia, como todas las virtudes, en el con­ texto global de su ética: la conformación con Cristo. La virtud de la justicia entra en la rectificación de la voluntad, pero en cuanto esta rectitud de la voluntad se ordena a otro 24. El pensamiento de Bue- 18 Cf. S an B ernardo , De gradibus humilitatis 1, 1 (P L 182, 941). 19 Cf. P latón , República 1. 2 0 Cf. A ristóteles , V Ethicorum 1 ss. 21 C f. F. J. T honnard , «Justice de Dieu et justice humain selon saint Augustin», en Avgvstinvs 12 (1957) 387-402; M. T. C lark , «Augustine on justice», en Revue des Études Augustiniennes 9 (1963) 87-94. 22 «Justitia est sua cuique tribuere, sibi et proximi et Deo», W. S trabon , Glossa ordinaria in Mt 5, 6 (PL 114, 90). 23 «Unde generalis notificado ipsius iustitiae ex hoc potest elici, quod iustitia est virtus reddens unicuique quod suum est», 3 Sent d.33, dub 1 (III, 728). 24 «Iustitia dupliciter accipitur: quia est iustitia generalis, et est iustitia specialis. Et iustitia generalis complectitur omnes virtutes, non solum cardinales, sed etiam theologicas. Iustitia vero specialis non est simpliciter rectitudo voluntatis, sed rectitu- do voluntatis ordinans ad alterum», 3 Sent d.33 a u q.2 conci, ad 4 (III, 715).