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88 MIGUEL ANXO PENA GONZÁLEZ buena hora, se dedicaba al oficio y hacía sus devociones, y des­ pués se encaminaba a realizar el trabajo que le era impuesto» 246. La vida fraterna. El Ceremonial belga señala el amor que se deben en la Orden los hermanos, entre clérigos y laicos: «de la misma fraternidad, humildad y amor que entre ellos se deben» 247. Pero esto se precisará todavía más: «Recuerden los hermanos laicos que se deben comportar no sólo como hermanos sino también como madres, con toda alegría, diligencia y amor hacia sus cohermanos, y a los cua­ les deben servir, no como a hombres, sino como a ángeles y santos, más aún como el mismo Cristo, cuyo lugar obtiene el prelado entre los mismos... Se pondere cuánta importancia tiene el confiar a los hermanos el cuerpo de todos los hermanos y todo el convento» 248. La santidad en la Orden. Si en algo ha sido crucial el papel desempeñado por los laicos ha sido en la santidad. Serán ellos los que den fuerza y vigor definitivo a la misma. Si esto se une a que se considera que son los santos los que mejor encarnan el carisma de una congregación, tendremos que recordar que el primer santo, San Félix de Cantalice (f 1587) era laico. Después de él, vendrá una larga lista de hermanos laicos, todos ellos erigidos desde el esque­ ma de la humildad y simplicidad. Una realidad que también recuer­ da el Ceremonial belga cuando insiste en que todos los hermanos deben brillar por su simplicidad: «Dicha simplicidad, si bien en toda la religión y en todos los hermanos debe manifestarse, sin embargo en los hermanos laicos debe brillar especialmente, tanto en los ges­ tos como en las palabras» 249. 246 Ibid., 405-406, lin. 37-3. 247 «ex ilia fraternitate et humilitate et amore, qui inter illos esse debet»: Cere­ monial belga, 77v. 248 -Recordentur laici fratres, quia non ut fratres tantum, sed etiam ut matres, cum tota hylaritate, diligentia et amore erga confratres suos se debent exhibere; et quibus non tamquam hominibus, sed angelis et sanctis, immo tamquam Christo, cuius locum inter ipsos praelatus obtinet, debent inservire... Perpendatur et hie quan- ti sit in manu unius fratris pauperculi aliquando corpora omnium fratrum et totum conventum committere»: Ceremonial belga, 112v. 249 «Quae quidem simplicitas, etsi per totam Religionem et in omnibus fratri- bus apparere debeat, in laicis fratribus tarnen potissimum debet elucere, tam in ges- tis quam in verbis»: Ceremonial belga , 78v.