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IDENTIDAD DEL CAPUCHINO, COMO HERMANO MENOR.. 29 los otros, más bien confirma esta compenetración y manera peculiar de trabajar 62. 2.3.2. S ign ificado teológico d e un nom bre: «Hermanos Menores» El biógrafo Tomás de Celano describe en su P rim era v ida cómo fue el mismo Francisco el que dio el nombre a la Fraterni­ dad: «Fue él efectivamente quien fundó la Orden de los Herma­ nos Menores y quien le impuso ese nombre en las circunstancias que a continuación se refieren: se decía en la Regla: “Y sean menores” (cf. 2Cel 18.71.148); al escuchar esas palabras, en aquel preciso momento exclamó: “Quiero que esta fraternidad se llame Orden de Hermanos Menores”» (ICel 38) 63. Según la opinión de los especialistas el nombre de la nueva fraternidad parece haber sufrido una evolución lógica. En los primeros momentos se habla­ ba de «pobres menores» y «varones pen iten tes oriundos d e la c iu ­ d a d d e Asís» (TC 37), era una designación interna del pequeño grupo. Con la confirmación por parte del papa se comenzó a hablar de hermanos sin más y posteriormente se hablará de Her­ manos Menores, en referencia a IR 7 64. Cuando Francisco está escogiendo este nombre para su recién creada Fraternidad está bebiendo de las corrientes características de la vida de la Iglesia 65, donde era frecuente usar este término de fr a - ternitas. La pecualiaridad de Francisco está en el acento que pone en que sus hermanos deben ser los menores; marcando así una clara distinción con cualquier otro tipo de fraternidades. El nombre tiene un sentido totalmente religioso, sólo comprensible con ojos de fe, porque el hacerse menor va en contra de las categorías humanas. 62 En referencia al trabajo manual, cf. V. R ed o n d o , «El trabajo manual en San Francisco de Asís», en Estudios Franciscanos 84 (1983) 85-129. 63 «Ut Ordo Fratrum Minorum fraternitas haec vocetur»: ICel 38. 64 Para todo el desarrollo, cf. K. E sser , La Orden franciscana..., 35-80. 65 Este término ya era común en los orígenes de la vida monástica, san Basi­ lio llamaba a su Orden, Fraternidad. El capítulo 21 de sus Constituciones monásticas llevan por título: «Quod non oportet a spirituali fraternitate resecari»: Const. monast., c. 21, en PG 31, 1394. También, en casi todos los movimientos surgidos durante los siglos XII-XIII los miembros se llaman hermanos. Con las órdenes mendicantes cobra mayor fuerza. Los miembros se llaman hermanos con un subrayado más específico y significativo.