PS_NyG_1999v046n001p0355_0405

UTKUM OMNIS ACTIO INFIDELIS SIT PECCATUM. 387 gracia son pecado 78. Las condenas del concilio de Trento no tocan en modo alguno la opinión de Gregorio de Rímini o la de san Agus­ tín cuando dicen que el hombre es incapaz de obrar bien sin espe­ cial auxilio. Cuando realizan esta afirmación, no niegan que tal auxi­ lio se otorgue a menudo a los pecadores y a los infieles, afirmando más bien que tales obras con las que el hombre se dispone a veces a la consecución de la justicia, como son los casos concretos de la atrición y del miedo, son buenas y procedentes desde el auxilio divino 79. Gregorio de Rímini nunca dijo que fueran pecado las obras todas de los infieles o las de los fieles que están fuera de la gracia. Tampoco se sigue semejante aseveración desde su opinión y sen­ tencia. Ha de reconocerse de todas formas que eso es precisamente lo que le achacan muchos con falsedad, habiendo constancia clara además a este respecto de que Gregorio de Rímini nunca hizo seme­ jante afirmación. Cuando se le objetó que, de su opinión, se dedu­ cía que eran pecados todas las obras, lo negó. Afirmó que los infie­ les realizan buenas obras gracias al especial auxilio de Dios, sobre todo cuando comienzan a disponerse a la justicia. Es posible pro­ bar, incluso, que no se sigue, desde la sentencia de Gregorio de Rímini semejante afirmación porque, aunque carezcan los pecado­ res y los infieles de la gracia que justifica, resultan ayudados a menu­ do por Dios con un auxilio especial en orden a la realización de buenas obras. No se sigue entonces que, dado que no pueden obrar bien moralmente, sus acciones todas sean pecado 80. 78 «In quibus verbis non diffinitur, omnia opera, quae fiunt ante gratiam iustifi- cantem , esse bona, nec omnia esse mala, sed quod possunt homines ante gratiam iustificantem bene interdum operan, tune, seilicet, quando praeuenti auxilio diuino paulatim mouent se ad iustitiam consequendam, concipiendo timorem, et dolendo de peccatis dolore quodam imperfecto, qui dicitur attritio, et alijs bonis operibus animum suum magis, ac magis ab iniquitate remouendo. In qua diffinitione aperte damnatur error Lutheri, qui dicit, omnia opera quae facit peccator, vt se disponat ad gratiam, esse peccata». 272a. 79 «Caeterum sententiam Gregorij atque Augustini nulla ex parte attingit. Nam quamuis dicant non posse hominem sine auxilio speciali bene operari, non tamen negant id auxilium saepe peccatoribus et infidelibus conferri, quin potius affirmant, quod ea opera, quibus homo interdum ad iustitiam consequendam disponitur vt attritio, metus, etc. sunt bona, et quod proficiscuntur ex auxilio speciali». 272a. 80 «Ex dictis infertur, quod ñeque Gregorius dixit nec sequitur ex illius opinio- ne atque sententia, quod omnia opera infidelium, aut fidelium existentium extra gra-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz