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ANTROPOLOGÍA Y ESCATOLOGÌA 263 estructura de la historia en el pensamiento de san Buenaventura es la misma que puede apreciarse en su metafísica: emanación, ejemplaridad, consumación 24 o también con el esquema platónico exitus-redditus (proodós-epistrophé ) . En san Buenaventura está marcada como un comienzo preciso, que es el instante en que Dios ha dado origen al múltiple y orienta a esta historia hacia un fin, el retorno a Dios. La teología de la historia de la salvación se presenta relacionada con esquemas del agustinismo tradicional. La historia está marcada con los signos de un fin inminente o con la dramática situación de la llegada del anticristo, sin embargo hay que ser cautos al leer algunos textos de san Buenaventura, como si su pensamiento estuviese marcado por una dirección apocalípti­ ca. La teología de la historia presenta un doble esquema, que ha llevado a atribuirle una dependencia de Joaquín de Fiore 25. La escatología bonaventuriana, tratado de las cosas últimas, es inde- 24 Cf. Hex, 1, 17 (V, 332). 25 En este sentido son conocidas las tesis de J. Ratzinger, que atribuía a san Buenaventura una dependencia del abad calabrés. Cf. J. Ratzinger, The Theo- logy of History in St Bonaventure (trad. del alemán), Chicago 1971, 9-55, 104- 118; San Bonaventura, La Teología della Storia, Firinze 1991, 37-120; 191-232. Dependientes de J. Ratzinger están, a mi juicio, las aportaciones de H. de Lubac, pero que matizan en muchos aspectos la verdadera posición de san Buenaventu­ ra con relación a la impostación que Ratzinger dio al tema. Cf. H. d e Lubac, La posteridad espiritual de Joaquín de Fiore. I. De Joaquín a Schelling (trad. del francés), Madrid 1988, 121-138. A pesar de las magníficas puntualizaciones que a la tesis de Ratzinger hiciera O. González, Misterio Trinitario..., 604-625, y el intento conciliador que supone la aportación de S. d a Compagnola, LAngelo del sesto sigillo e l ’«Alter Christus», Roma 1971, 161-198. N. Falbel resumió críti­ camente el estado de la cuestión hace veinte años, «Sáo Boaventura e a Teología da Historia de Joaquín de Fiore. Un resumo critico», en SB, II, 571-584. A este tema hizo buenas aportaciones B. Me Ginn, «The significance of Bonaventure’s Theology of History», en The Journal of Religión Supplement 58 (1978) 64-81; el problema dista mucho de estar solucionado. Al interpretar la misión eclesial de san Francisco, Buenaventura ha seguido los esquemas de la escatología francis­ cana tradicional, dependiente de san Agustín, como demostró E. R. Daniel, «St. Bonaventure: Defender of Franciscan Eschatology», en SB, IV, 793-806, aun­ que nuevos estudios apuntan la presencia del joaquinismo en el pensamiento franciscano, que a él se vincula. Cf. A. Rotzetter, «Eschatologie und Utopie in Franziskanischen Denken», en Franz Studien, 67 (1985) 107-113; L. Smitz, «Die Utopie des mystischen Zeitalters bei Bonaventura (1217-1274)», en Franz Stu­ dien, 67 (1985) 114-133.

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