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APROXIMACIÓN A EDITH STEIN. 87 manifiesta progresivamente; lo que está accediendo a nosotros y nos sale constantemente al encuentro a través de los avatares de la vida; es lo que se descubre y se nos revela paulatinamente»155. Sin abandonar la verdad filosófica, o mejor dicho desde ella, nuestra doctora se acerca primero y, luego, abraza la verdad religio­ sa. Una verdad que se presenta «como búsqueda de la presencia de Dios en el centro de la vida humana, de modo que quien logra penetrar en su propia intimidad descubre en ella la realidad de Dios como término de una relación personal y como hontanar de la pro­ pia existencia también personal. El absoluto queda así explicitado en el área de la vida racional como último principio posibilitante del hombre en su calidad de ser reflexivo y de existencia interper­ sonal» 156. Edith como judía, como cristiana, experimenta que Dios es la Verdad, porque la hace persona en el mundo y porque es el único que puede brindarle consistencia y prestarle firmeza perdurable. Una consistencia y firmeza a la que Edith responde con la fidelidad. 3. EXPERIENCIA RELIGIOSA De la intuición del fenómeno, pasando por la empatia y la racionalización, llegamos a la experiencia: colofón steiniano de todo conocimiento. En primer lugar, hago una somera presentación de la experiencia y de sus distintos ámbitos: experiencia humana, expe­ riencia religiosa y experiencia de Dios. Para, en un segundo momen­ to, acercarnos a la experiencia de verdad vivida por Edith Stein. 3.1. E l fe n ó m e n o d e l a e x p e rie n cia r e lig io s a 3.1.1. La experiencia Experimentar se ha convertido para el hombre contemporáneo en una forma evidente, clara, vivencial, de aproximación y conoci- 155 Ib., 191. 156 Ib., 193.