PS_NyG_1997v044n003p0415_0452

446 MIGUEL ANXO PENA GONZÁLEZ te entregarnos al servicio de Dios con total disponibilidad 173. Para el franciscano, la pobreza no es una simple opción sino un estilo d e vida qu e se am a 174, que se tiene que ir aprendiendo y haciendo realidad todos los días. La pobreza evangélica es un ideal trascen­ dental de nuestra forma de vida 175, que por ser tal, debe ser guar­ dada con fidelidad. El ejemplo de vida austera y sencilla que, duran­ te cuatrocientos años llevaron nuestros hermanos, sigue siendo una realidad que necesita hacerse patente en nuestra Iglesia y en nues­ tro mundo. El capuchino, sin necesidad de palabras, tiene que expresar la vida sencilla de su persona y de su fraternidad 176. La vivencia de una vida comunitaria lleva a la total entrega de todo lo que recibimos de la fraternidad, así todos recibimos de ella «el mismo alimento, el vestido y todo lo n ecesario» 177. Es éste un aspec­ to de nuestra vida en el que se está necesitando de la creatividad de los hermanos para hacerlo cada día más palpable y visible, de tal manera «que no qu eram o s ser d el núm ero d e los fa ls o s p o b r e s que desean ser pobres, p ero a condición d e que no les fa lte nada» 178. c) C astidad. Como en toda vida de castidad consagrada, la razón está en el amor preferente a Dios, «que se a b r a z a voluntaria­ mente bajo la moción d el Espíritu Santo p o r Cristo y su Reino» 179. Es la posibilidad real para la oblación de nuestras vidas, que com­ pleta la libertad asumida desde la pobreza y la obediencia. Todo el camino es una llamada continua a vivir la castidad como un don y gracia de Dios 180, sin ser ingenuos al querer olvidar las renuncias que conlleva implícitas 181. Se señala esto para que los hermanos no caigan en el engaño de una existencia que se deja llevar por «el tedio d e la vida, la soledad d el corazón , el am o r a las comodidades, las 173 Const. 74, 3- 174 T. R icci , El patrimonio espiritual de la Constituciones de los Hermanos Menores Capuchinos, Edición privada de los Capuchinos de Navarra, Pamplona, 1995, 69. 175 Const. 60, 1. 176 Const. 60, 3. 177 Const. 61, 3. 178 Const. 74, 2. 179 Const. 168, 1. 180 Const. 170, 2. 181 Const. 170, 1.