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DIMENSIÓN ESPIRITUAL DE LAS CONSTITUCIONES RENOVADAS DE LOS HERMANOS MENORES CAPUCHINOS La llamada del Papa en la Carta Apostólica Tertio Millenio Adve­ niente, como preparación del jubileo del año 2000, nos ha estimula­ do a acercarnos a nuestras fuentes y, desde ellas, hacer una lectura coherente de nuestra identidad en la Iglesia para el mundo en el que nos ha tocado vivir. Intentamos hacer una reflexión sobre cuáles tienen que ser las claves de lectura de nuestra vida en Fraternidad, para hacer real todo aquello que nuestras Constituciones tienen como evidente a la luz de la vida y escritos de San Francisco. Por lo mismo en nuestro trabajo partimos de la reflexión profunda que Francisco vive y expe­ rimenta. Toda su vida se orienta desde el Espíritu, siendo la clave de lectura para interpretar su vida y el desarrollo de la Orden de los Hermanos Menores. Como Hermanos Menores Capuchinos no pretendemos otra cosa que una lectura auténtica de nuestra vida como consagrados, partiendo de las mismas fuentes y medios que Francisco nos propo­ ne. La vida capuchina, desde sus orígenes, quiere volver a vivir con integridad el estilo de vida marcado por Francisco. Por lo mismo, el primer capítulo de este trabajo responde a esa intuición personal de Francisco, que se abre como clave de lectura para todos aquellos que optamos por vivir como hermanos menores. Es en nuestras Constituciones renovadas donde queda especial­ mente subrayado ese compromiso nuestro como capuchinos. Siguiendo el criterio tradicional de nuestra Orden — respaldado e iluminado por el Concilio y otros documentos posteriores— las Constituciones renovadas hacen particular hincapié en la dimensión espiritual de nuestra vida. Tratando de promover el compromiso y la vivencia personal de cada uno de los hermanos que formamos parte de la Fraternidad. Es la recuperación de un talante de vida

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