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330 JAIME REY ESCAPA Una vez que ha quedado clara la realidad e integridad de la naturaleza humana de Cristo, nos ocupamos de su libertad humana. Tomamos como punto de partida el principio Actiones sunt supposi- torum. Dos términos explican dicho axioma: el principium quo, que se refiere a la naturaleza, y es la fuente misma de la actividad; y el principium quod, que se refiere a la persona, y es el sujeto al cual se atribuyen las acciones. Según esto, las acciones humanas de Jesús nacen de su naturaleza humana pero son atribuidas a su única per sona: la del Verbo. La persona del Verbo incluye la naturaleza humana, que es principio de acción y autónoma en sus actuaciones. La naturaleza humana es terminada por el Verbo, pero sus acciones no dejan de ser efectivamente sus propias acciones y no pueden dejar de serle atribuidas. La unión hipostática sitúa al homo assumptus dentro del ámbito de lo finito. La naturaleza humana de Cristo no es elevada, ni en su ser ni en su operación hasta el «esse divinum», sino por la comunicación de idiomas 2<s: «A la segunda razón anteriormente aducida, que trata en espe cial acerca de la operación del Verbo, cuando se dice que el Verbo efectúa todas las operaciones que realiza la naturaleza humana, digo que el Verbo, respecto de las operaciones de Cristo, no tiene ningu na razón de causa que no tenga el Padre y el Espíritu Santo»27. Cuando hablamos de la actividad de Dios sobre las otras cria turas reconocemos que Dios es principio único de actividad, que permite también a la voluntad humana de Cristo producir sus actos de forma libre, de la misma manera que se lo permite a los otros espíritus creados: 26 Idioma es la propiedad y los atributos de una naturaleza. En virtud de la unión hipostática, Cristo es partícipe de las prerrogativas divinas y de las propieda des que pertenecen a la naturaleza humana. La misma unión se traduce sobre el plano lógico en una recíproca predicación de las propiedades humanas y divinas, no en una atribución directa de naturaleza a naturaleza, sino de la propiedad de cada naturaleza a la única persona del Verbo. 27 «Ad secundum rationem prius factam, quae est specialis de operatione Verbi, cum dicitur, omnes operationes operatur Verbum, quas operatur natura humana, dico quod nullam rationem causae habet Verbum respectu operationis Christi, quam non habet Pater et Spiritus Sanctus». Rep. Par. III, d.12, q.un., n. 7, XXXIII, 328b.
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