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128 ENRIQUE RIVERA enzarzado entre sí a los pueblos europeos en guerras que prácti­ camente han sido continuas 23. En la política europea, junto con la «razón de estado», se ha practicado intensamente el «colonialismo». Se ha inviscerado en Europa desde la creación de las Compañías de Indias, tanto las holandesas como las inglesas, exclusivamente comerciales. Frente a ellas es de justicia histórica constatar que España tiene otra acti­ tud en su época colonial. Hemos escrito aquí el vocablo colonial en atención a nuestros intelectuales americanos. Éstos la utilizan con el convencimiento de que España trató a sus posesiones en América como colonia. Pero a ello hay que oponer que nunca nuestros reyes pensaron que allí tenían una colonia. Isabel la Católica declara en su testamento que los aborígenes de América son tan súbditos suyos como los de Castilla. Y como tales debían ser tratados. Que fueran muchos los abusos contra esta norma, no quita valor a la misma. Menos cuando sus grandes sucesores, Carlos V y Felipe II —por citar dos de máximo influjo en Améri­ ca— declaraban en sus documentos que tenían estos reinos y aquellos reinos distanciados geográficamente, pero no por cualifi- cación política. El que durante tres siglos —del xvi al xvm— no se pronunciara en España la palabra «colonia» dice muy alto que ésta nunca consideró que sus territorios americanos eran meras colonias 24. El vocablo «colonia», como categoría histórica, ha significado que las tierras lejanas de la metrópoli han de dar a ésta las materias primas para competir en la lucha comercial. El autorizado historia­ dor J. Pirenne da al volumen VI de su obra, Las grandes corrientes de la historia este título: «El siglo xix progresivo v colonialista». Sobre el segundo calificativo escribe, comentando la reunión que tuvo lugar en Berlín: «En este congreso, presidido por Bismarck el 8 de noviembre de 1884, participaron catorce potencias, y en febrero 23 Cf. F. M ein eck e, Die Idee der Staatráson in der modeme Geschichte, M ü n - chen, 1924; G. F e rn á n d e z d e la M o r a , La quiebra de la razón de Estado, Madrid, 1951. Por lo que toca a la España del siglo xvii: J. A. M a ra v a ll, Teoría española del Estado en el siglo x v ii, Instituto de Estudios Políticos, Madrid, 1944. 24 Cf. Juan P é re z d e T u d e la , Las armadas de Indias y los orígenes de la políti­ ca de colonización, Madrid, 1956.

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