PS_NyG_1996v043n001p0283_0352

UNIDAD Y REFLEXIÓN 287 b) En relación con la realidad misma, se trataría de que los mencionados conceptos son el fundamento que hace que algo se dé como ente, como uno, como verdadero o como bueno. La concepción platónica de los trascendentales significaría, en consecuencia, que éstos son la verdadera realidad. Ello se confirmaría por la consideración de la identidad de los trascendentales con Dios mismo, fundamento último de todo cuanto es. Esto no significa, sin embargo, que Eckhart sea platónico sin más. Lo es sólo bajo algunos aspectos. En otros, por el contrario, como en la concepción de los universales en general, adopta una posición que muy bien se podría considerar como antiplatónica, según tendremos ocasión de comprobar en la parte final de este trabajo. En relación con la identificación de los trascendentales con Dios, Eckhart puede comparar despreocupadamente los trascenden­ tales con cualidades, porque la sustancia de Dios es absolutamente autosuficiente, y por ello las cualidades tienen en él rango sustan­ cial, al igual que lo tienen las restantes categorías, a excepción de la relación: «Resumiendo, pues, brevemente digo que la relación no se convierte en sustancia (no pasa a ser sustancia), tanto en razón de su género como porque en Dios la sustancia no es lo mismo que la relación. Así como al contrario, en el ámbito de lo divino los otros ocho géneros de accidente como, p. ej., la cualidad, pasan a ser sustancia. A su vez, en Dios la sustancia misma, debi­ do a su suficiencia singular, es cualidad, adquiere el significado y la propiedad de la cualidad y está para Dios mismo en lugar de la cualidad. En efecto, en razón de su misma sustancia Dios es “cual”, como sabio, bueno, etc., pero no está relacionado en razón de su sustancia»3. 3 «Resumendo igitur breviter dico quod relatio (turn quia) secundum rationem sui generis (non) transsit in substantiam, turn quia substantia non est in deo pro relatione, sicut e converso alia octo genera accidentis, puta qualitas in divinis transit in substantiam. Iterum etiam substantia ipsa in deo ex sufficientia sua singulari est qualitas et sortitur rationem et proprietatem qualitatis et est ipsi deo pro qualitate. Deus eni sua ipsius substantia est qualis, puta sciens, bonus et huiusmodi, non autem sua substantia est relatus*« (LW II, 74,5-12).

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz