PS_NyG_1996v043n001p0247_0260

248 MODESTO BERCIANO co acerca del ser. La experiencia es un concep to complejo, que sobrepasa inmediatamente lo sensible y llega mucho más allá de esto. Precisamente por esta vía de la búsqueda de presupuestos y siguiendo un método fenomenológico hermenéutico, autores como Lotz hablan de una experiencia transcendental, de experiencia onto- lógica y de experiencia metafísica del Tú absoluto, de Dios. El concepto de experiencia es, a poco que se reflexione, bas­ tante complejo. Mediante estas pocas reflexiones acerca de él, tal vez nos hayamos acercado un poco, o por lo menos hayamos abier­ to una puerta hacia lo que indicamos en el título. Quizá ahora no resulte tan extraño hablar de experiencia de Dios en la historia. Nosotros distinguiríamos diferentes tipos de esta experiencia; o, si se quiere, diferentes niveles de la misma. Un primer nivel sería una experiencia de tipo transcendental, general y vaga, pero fundamental. Esta primera experiencia de Dios no es punto de llegada de un razonamiento; no se logra mediante un esquema causal, ni mediante una búsqueda de supuestos implí­ citos, tal como se podría hablar o se habla de hecho en algunos de los filósofos citados. No se trata de llegar a Dios mediante las pruebas, ni de un proceso de reflexión buscando las causas de los entes. No se trata de una experiencia adquirida por reflexión, aun­ que ésta no se excluya de ella, sino de una experiencia anterior y más originaria. Más que de un punto de llegada se trataría de un punto de partida. Tampoco se trataría de una intuición a la manera del ontolo- gismo, ni de una idea innata clara y distinta, como la que afirma Descartes. Se trataría de algo mucho más sencillo y tendría más que ver con ese presaber o saber atemático acerca del ser, del que habla Heidegger cuando trata de la comprensión permanente y vaga del ser como de un hecho ya ahí siempre presente. «Nos movemos ya siempre en una comprensión del ser. De ella surge la pregunta explícita por el sentido del ser y la tendencia al con­ cepto de éste » l . 1 M. H eidegger , Sein und Zeit, Frankfurt 1977, p. 7.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz