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¿ES LA RELIGIÓN JUDEO-CRISTIANA RESPONSABLE...? 213 to bíblico, el hombre ha sido creado a imagen de Dios y la natura­ leza está totalmente sometida al hombre»10. Tres años antes del famoso discurso de White a la Asociación Americana del Progreso de la Ciencia, McHarg afirmó: «El primer capítulo del Génesis contiene el concepto de Dios, de la naturaleza y del hombre tal como los conciben los judíos y los cristianos. Al hombre, creado a imagen de Dios, se le ha dado el poder de domi­ nar la tierra. De ahí deducen los judíos y los cristianos el concepto de un universo orientado al hombre; la tierra no tiene otra finalidad que servir al ser humano. Su relación con la naturaleza es de domi­ nio y subyugación»11. Alan W. Watts sostenía, en 1958, que aunque el cristianismo no estaba de suyo contra la naturaleza, era una reli­ gión urbana que había fomentado las transformaciones del medio ru ra l12. El artículo de White se ha convertido en un clásico de la litera­ tura ecológica y se ha impreso en numerosos libros y revistas. Apa­ reció incluso en un folleto que se distribuyó a los participantes el primer Día de la Tierra en 1970. Asimismo, el 2 de enero de 1989, la revista «Time*» popularizó la idea cuando el consejo editorial eli­ gió al planeta tierra como la figura del año. En un editorial se afir­ maba lo siguiente: «La religión judeo-cristiana introdujo un concepto radicalmente diferente de las otras tradiciones religiosas. La tierra fue creada por un solo Dios que, después de formarla, ordenó a sus habitantes: “Sed fecundos y multiplicaos y llenad la tierra y some­ tedla. Dominad sobre los peces del mar, la aves del cielo y todo lo que se mueve sobre la tierra”. La idea de dominio puede ser inter­ pretada como una invitación a usar la naturaleza como convenga. Por tanto, la expansión del cristianismo, que dio ocasión al desarro­ llo tecnológico puede, al mismo tiempo, haber dado lugar a la explotación de la naturaleza que acompañó con frecuencia a la tec­ nología» 13. 10 D. T. S uzuki , Zen Buddhism (ed.) William Barrett, Nueva York. 11 Ian M charg , The Place o f Nature in the City o f Man, en Annals o f the Ame­ rican Academy o f Political an d Social Science, marzo, 1964, p. 12. 12 Alan W . W atts , Nature, Man a n d Woman, Nueva York, Random House/ Vintage, 1958, 1970, pp. 25-53- 13 «Time» magazine, 2 de enero de 1989, pp. 29-30.

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