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Perteneció a la orden franciscana, en la rama reformada descalza. Fue miembro de la Provincia de San José, de Castilla la Nueva. 2. Oficios y funciones El texto de su obra teológica aporta algunos datos importantes para conocer ciertos rasgos de carácter biográfico. Consta que fue durante va­ rios años profesor de Sagrada Escritura y de Teología Dogmático-Escolás­ tica. En 1739 era lector de Prima en el convento de Toledo. Precisamente durante el desempeño de ese cargo, en 30 de octubre de ese año firmó, con el P. Joaquín de Albalate, una carta de aprobación de la Vida de San Martín de la Ascensión, de la que es autor el P. Marcos de Alcalá17. En otra ocasión consigné estos datos biográficos de Juan de Consuegra; «Ocupó los más altos cargos de gobierno en su Provincia, según la secuen­ cia trazada por Lorenzo Pérez en 1924. En 1740 era Guardián del conven­ to de Odón; en octubre de 1743 fue elegido superior del convento de Toledo; tres años más tarde del convento de Velada; y en los años 1749 y 1750 de nuevo superior de Toledo. En el Capítulo provincial celebrado en el convento de San Luis de Paracuellos el día 22 de abril de 1752 fue elegido superior de la Provincia. La primera información de que tenemos noticia desempeñando ese oficio lleva fecha de 13 de mayo de ese mismo año; la última pertenece al 7 de abril de 1755»18. Juan de Consuegra fue hombre de amplia erudición. Así se deduce del contenido de su Cursus de teología. Aparece como gran conocedor de la literatura patrística y de la teología medieval y clásica, así como de la doctrina e historia de los concilios ecuménicos y particulares. Cita, expone y enjuicia las teorías y opiniones de los grandes maestros y de algunos teólogos menos representativos. Conoce muy bien el pensamiento y la doc­ trina de los teólogos de los siglos XVI y XVII, exponentes de la llamada nueva teología de aquel tiempo, aunque no prodiga mucho las citas ni las referencias concretas. En muchas ocasiones se refiere a los «escolásticos», a los «teólogos del tiempo», a los «teólogos católicos, a los «escritores místicos», a los «teólo­ gos marianos», etc. Bajo la capa de su letra son fácilmente identificables los nombres de teólogos que él tenía in mente, cuando estaba escribiendo esas referencias generales. 17. Ver mi estudio citado (ver nota 4), /. c., p. 178. 18. lbid., p. 178. JUAN DE CONSUEGRA Y SU APORTACION AL ESCOTISMO ESPAÑOL 381