PS_NyG_1993v040n002p0315_0327

PRESENCIA DE DIONISIO AREOPAGITA... 317 1. Concepción de Dios en el Corpus Dionysiacum Los nombres fundamentales con que se designa a Dios en el CD son los de Theós y Theótes. El primero es utilizado 118 veces; el segundo, 44. El contenido significativo de Theós está constituido por dos ámbitos que obe­ decen a instancias diferentes. Uno está configurado por De Coelesti Hiarar- chia y Ecclesiastica Hiararchia. Y en él, tendría como contenidos significati­ vos: causa de la Luz, de la Purificación y de la Divinización; causa del proceso dialéctico tanto descendente como ascendente que se da en el cos­ mos jerárquico-dionisiano; término último de toda actividad jerárquica que conduce a la divinidad. El otro ámbito está formado por el tratado De divinis Nominibus y, fundamentalmente, está constituido por la Theonomía, de la cual se hace en dicho tratado una explicitación. Las coordenadas de esta Theonomía son la trascendencia divina y su inmanencia en el mundo con todo lo que esto supone. La diversidad de ámbitos señala la diferencia de preocupaciones dionisianas en cada uno de los tratados aducidos. Y, en consecuencia, también la diversidad de elucubración teológica. Como en castellano «divinidad» es el abstracto de «Dios», en griego Theótes lo es de Theós. Con ello, se nos indica ya que el uso de Theótes se presta a ser utilizado en el circunscripción de lo abstracto. Esto aparece claro, cuando lo vemos casi en todos los contextos especulativos de la Trinidad en los que casi, por completo, desaparece el término Theós, así como en los contextos de índole racional. El significado de Theótes lo indica el Pseudo-Dionisio con estas pala­ bras: «la Divinidad es una providencia que lo contempla todo, que en su bondad perfecta penetra todas las cosas y las contiene todas a la vez; la providencia que teniendo plenitud en sí misma supera en eminencia y dignidad a todas las cosas que de ella gozan»4. A primera vista, se observa ya que en este contenido significativo se hallan situados conceptos como bondad, providencia, plenitud divina e inmanencia por parte de Dios en todas sus criaturas. Esta esfera semántica se encuentra ampliada y enrique­ cida con un conjunto de calificativos y verbos. Así, su modo de ser se constituye sobre toda sustancia, no existe nombre con que poder designar­ la y es, por ello, Inefable, Anónima e Innombrable, permaneciendo siem­ pre escondida y oculta a la mente del hombre. Por otro lado, en el tratado De Divinis Nominibus, el Pseudo-Dionisio sistematiza ideas de corte eminentemente ejemplarista y creacional. Según él, el modo de ser de los entes creados es un modo de reflejar a Dios y de 4. De Divinis Nominibus 969c.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz