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202 ALEJANDRO VILLALMONTE del siglo XX. El tema del pecado original está siendo un ‘test’ decisivo en la hermenéutica de textos del magisterio de la Iglesia. Se comprende el temor a que, el caso de la negación del pecado original, produzca una primera impresión desagradable, como si se atentase contra, o se negase la infalibi­ lidad doctrinal de un concilio (ecuménico), de la misma Iglesia, en suma»3. Aunque el tema tratado por Sayés en su libro es amplísimo, mi comen­ tario se centra, ante todo, en el cap. VII, en el que se ofrece una «nueva perspectiva» —específicamente demonológica, satanista— para reflexionar y aproximarse a la intelección del «abismal misterio» del pecado original. Como pórtico y para contextualizar la teoría expuesta en ese capítulo, parece conveniente recordar, al menos en sus grandes líneas, la doctrina general sobre el pecado original, tal como la expone Sayés en prolijos capítulos anteriores (p. 3-294). Tampoco puede omitirse del todo el co­ mentario al cap. VIII (y el apéndice) donde se pondera la mísera condición del hombre caído , por el pecado de Adán, bajo el dominio de Satanás (p. 338-385). 1. L a doctrina del pecado o rig in al vista por J. A. S a y é s En diversos escritos suyos y, nominalmente, en este libro, J. A. Sayés trata el tema del pecado original como si de una verdad nuclear del cristia­ nismo se tratase. Posiblemente todo su sistema de creencias se le vendría a tierra si se le desposee de este dogma basilar de su credo. En sus estudios sobre el pecado original Sayés se basa continuamente en una visión hamar- tiocéntrica de la «actual» historia y economía de la gracia. Digamos que se adopta una perspectiva «pecadorista», ya que el pecado (originante-origi- nado) es propuesto como el evento originario/germinal del que surge, y luego como el gozne sobre el que gira el propio acontecimiento de Cristo, su entrada y actuación en esa historia. Perspectiva pecadorista que se re­ fuerza y matiza siniestramente con la perspectiva demonológica , personalísi- ma del prof. Sayés. Solemnización del pecado original que constrasta con la tendencia creciente de teólogos católicos que prefieren hablar de un cristianismo sin pecado original , e.d., limpio de todo contacto con esa ancestral, desafortunada creencia. ¿Qué dice la Biblia sobre el pecado original? Siguiendo una opinión común, hasta fecha reciente, Sayés encuentra bien fundada en la Escritura la doctrina del pecado original. 3. A. VILLALMONTE, El pecado original , 553s.