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50 ISABEL LOPEZ RUIZ La contradicción: base del pensamiento filosófico unamuniano En la base del pensamiento unamuniano tiene gran importancia el con­ cepto de contradicción. Desde el principio se le reveló a Unamuno una de sus ideas claves: que la armonía está hecha de desarmonía, la concordia de discordia y la paz de guerra. Si observamos el marco histórico y personal en el que vivió, podemos encontrar una justificación ante esta postura, que si bien es verdad pudo estar al margen de su situación vital, no cabe duda que al menos influyó en ella. Por una parte tenemos, que D. Miguel nació en Bilbao el 29 de sep­ tiembre de 1864. Hasta 1880, fecha de su traslado a Madrid para estudiar en la Facultad de Filosofía y Letras, sus experiencias vitales fueron exclusi­ vamente vascas, y particularmente bilbaínas. A partir de 1880 y sobre todo desde 1884, cuando ganó la cátedr de griego en la Universidad de Salaman­ ca, la experiencia vital vasca se entrelazó para siempre con la experiencia castellana, con lo que resulta que en su vida estos dos paisajes funcionarán ya en él como dos culturas contrapuestas. A estos hechos se añade además que Unamuno acota su existencia entre dos guerras civiles. En 1874 siendo todavía un niño de diez años vive el bombardeo de Bilbao por los carlistas y poco antes de morir es víctima del levantamiento del General Franco contra la República española. En 1933 —tres antes de morirse— expresa su sentir de esta manera: «Desde que empecé a escribir para mi pueblo he seguido en esto como en lo demás, una misma línea. No derecha en el sentido de línea recta, sino como la vida, llena de vueltas y revueltas; una línea dialéctica. El pensamiento vivo está tejido de íntimas contradicciones... Como que no se puede participar en una guerra civil sin sentir la justificación de los dos bandos en lucha; como que quien no sienta la justicia de su adversario —por llevarlo dentro de sí— no puede sentir su propia justicia... Y es como llevando la guerra civil española dentro de mí, he podido sentir la paz como fundamento de la guerra y la guerra como fundamento de la paz» 15. Como él mismo lo expresa, fue durante toda su vida un hombre de contradicciones: «es la contradicción íntima precisamente lo que unifica mi vida y le da raón práctica de ser. O más bien es el conflicto mismo; es la apasionada incetidumbre lo que unifica mi acción y me hace vivir y obrar» 16. 15. M. UNAMUNO, La ciudad, de henoc. Comentario 1933, México, Séneca 1941, 81-84. 16. M. UNAMUNO, Del sentimiento trágico de la vida. Ensayos II, Madrid, Agrilar, XI, 963.